1 Pedro 4:19 - Printer Friendly

LBLA: Por consiguiente, los que sufren conforme a la voluntad de Dios, encomienden sus almas al fiel Creador, haciendo el bien.

NBLA: Así que los que sufren conforme a la voluntad de Dios, encomienden sus almas al fiel Creador, haciendo el bien.

NVI: Así pues, los que sufren según la voluntad de Dios, entréguense a su fiel Creador y sigan practicando el bien.

RV1960: De modo que los que padecen según la voluntad de Dios, encomienden sus almas al fiel Creador, y hagan el bien.

JBS: Y por eso los que son afligidos según la voluntad de Dios, encomiéndenle sus almas, como a fiel Criador, haciendo bien.

¿Cómo deberían responder los cristianos al sufrimiento en esta vida, especialmente al sufrimiento que experimentamos debido a que seguimos a Jesús? Pedro responde a esta pregunta en este versículo.

Primero, debemos entender que a veces Dios "necesita" que suframos para que así podamos confiar más en Él. Hasta ahora, Pedro ha dicho Dios puede usar la esperanza y el regocijo que sentimos a través de las dificultades para que otros pongan su fe en Cristo. Dios puede usar nuestras luchas para glorificar a Cristo, y puede utilizar el sufrimiento como una especie de disciplina para hacer crecer la fe que hemos depositado en Él.

Entonces, sabiendo que podemos vivir tiempos difíciles y eso forma parte de la voluntad de Dios, Dios quiere que le confiemos nuestras almas, ya que Él es nuestro Creador, y Dios es fiel. Dios es bueno más allá de si las cosas nos van bien o mal, y eso es algo que tanto nosotros como el mundo que nos rodea debemos entender bien. Dios nos está cuidando a través de nuestros sufrimientos y nos está preparando mientras avanzamos por el camino que nos llevará hacia la gloria de la eternidad.

Por tanto, le confiamos nuestras almas a Aquel que creó nuestras almas y todo lo que existe, y no hay nadie que sea más digno de recibir nuestra confianza. Entonces, ¿qué debemos hacer ahora, mientras esperamos ese día, incluso aunque estemos sufriendo? ¿Cómo podemos saber si estamos confiando en Él? El mundo puede ver que seguimos a Dios si hacemos el bien. Nuestra fe en Dios a través de Cristo se demuestra haciendo el bien incluso cuando estamos sufriendo. Al rechazar la venganza y los placeres de esta vida, demostramos que en verdad somos un pueblo santo que ha sido apartado por Dios para cumplir Sus propósitos.

En 1 Pedro 4:12–19, Pedro les recuerda a los cristianos que no deben sorprenderse cuando lleguen momentos difíciles llenos de sufrimiento, sino que deben regocijarse ante la oportunidad de sufrir tal y como lo hizo Cristo. Un día, nos alegraremos cuando la gloria de Cristo finalmente se revele y, en la actualidad, estamos siendo bendecidos porque la gloria de Dios El espíritu está con nosotros. Al mismo tiempo, el sufrimiento causado por nuestros propios pecados no cuenta, y tampoco debemos tomar represalias contra quienes nos hagan daño. Cuando nos persiguen por hacer el bien, Dios puede "juzgar" a Su pueblo y fortalecer la fe que hemos depositado en Él. Al final, Dios juzgará con mucha más severidad a todas las personas que rechacen la fe en Cristo.

Pedro continúa hablando sobre la manera en que los cristianos deben responder cuando se enfrentan a la persecución: adoptar la actitud de Cristo y saber que los propósitos de Dios a veces incluyen momentos de sufrimiento durante esta vida. Es importante alejarse de los placeres que tienen la capacidad de cegarnos la mente y estar alerta para orar con eficacia durante los últimos tiempos. De hecho, debemos regocijarnos cuando se nos ofrece la oportunidad de sufrir tal y como lo hizo Cristo. Dios usa el sufrimiento para refinar la fe de Su pueblo, y nuestro sufrimiento presente contribuye a la gloria futura que Dios acabará recibiendo. Por tanto, debemos seguir haciendo el bien mientras sufrimos, confiándole nuestra alma a Dios.

Pedro sigue hablando sobre cómo vivir mientras sufrimos de acuerdo con nuestra fe en Cristo. Hasta ahora, Pedro nos asegurado a los cristianos que nuestro futuro está asegurado con Dios. Somos Su pueblo santo, y nos ha apartado para cumplir Sus propósitos. Los cristianos debemos vivir en sumisión a toda autoridad humana. Ahora, en el capítulo 4, Pedro escribe que debemos adoptar la actitud que Jesús tenía hacia el sufrimiento y saber que en esta vida vamos a sufrir de una manera u otra, para así evitar el pecado que adormece la mente mientras nos amamos los unos a los otros con sinceridad. Dios puede usar el sufrimiento en esta vida para refinar nuestra fe, pero es importante saber que el fin de todas las cosas está cerca.

Unos 30 años después de la resurrección de Jesús, los cristianos comenzaron a ser perseguidos por su fe con más fuerza que nunca. ¿Cómo debían responder ante tal situación? ¿Cómo debemos responder ante el sufrimiento en la actualidad? El apóstol Pedro escribió esta carta para consolar a los creyentes y animarlos a que se mantuvieran fuertes. Pedro los anima a poner toda su esperanza en el futuro perfecto que pasarán con Cristo, y a obedecerlo y confiar en Él en el presente, incluso durante sus sufrimientos. Cristo sufrió mucho y, ahora, los seguidores de Cristo tienen la oportunidad de seguirlo incluso a través de ese sufrimiento, y de mostrar Su gracia y Su poder a través de la manera en que ponen su esperanza en Él, la manera en que lo obedecen y depositan su fe en Cristo.