1 Timoteo 4:5 - Printer Friendly

LBLA: porque es santificado mediante la palabra de Dios y la oración.

NBLA: porque es santificado mediante la palabra de Dios y la oración.

NVI: porque la palabra de Dios y la oración lo santifican.

RV1960: porque por la palabra de Dios y por la oración es santificado.

JBS: porque por la palabra de Dios y por la oración es santificado.

Aquí, Pablo sigue hablando del mismo tema que ha estado tratando durante los últimos versículos. Todo lo que ha creado Dios es bueno. Algunos falsos maestros, en particular los que se adherían al gnosticismo, estaban enseñando que la materia física era algo malo. Como consecuencia, estas personas desaconsejaban que las personas se casaran o comieran de ciertos alimentos. Para contestar a esto, Pablo habla desde el marco de referencia de Dios el Creador (1 Timoteo 4:3–4). De hecho, todo lo que Dios creó se puede usar de una manera positiva, y por eso no debemos rechazar la creación sin más. En lugar de esto, debemos estar agradecidos por la oportunidad que tenemos de usar Su creación de una manera positiva que glorifique Su nombre.

Aquí, Pablo amplía esta enseñanza aún más. Toda la creación física se puede usar de manera positiva, y "por la palabra de Dios y por la oración es santificado". Los alimentos que nos comemos, los materiales con los que construimos, la bendición de la sexualidad dentro de un matrimonio: todo lo que Dios nos dio en este mundo, no solo debe verse como algo bueno, sino como algo que puede ser santo y puede usarse para Su gloria, siempre que lo usemos de acuerdo con Su voluntad.

En 1 Timoteo 4:1–5, Pablo hace una transición y comienza a centrarse en las falsas enseñanzas que estaban minando la iglesia por aquel entonces. En este pasaje, a Pablo parece preocuparle especialmente los maestros que fomentaban una práctica llamada ascetismo, la cual consistía en rechazar las comodidades del mundo con el fin de ser personas más espirituales. En la época de Pablo, había grupos como los gnósticos que enseñaban que la sexualidad y la comida eran cosas físicas y, por tanto, corruptas. Por el contrario, tal y como lo explica Pablo, todo lo que Dios ha creado puede ser algo más que "bueno", puede llegar a ser "santo", siempre y cuando se utilice tal y como Dios lo planeó desde el principio.

1 Timoteo 4 nos ofrece una perspectiva importante acerca de las próximas instrucciones que Pablo compartirá a lo largo de este capítulo. Después de compartir algunos detalles con Timoteo sobre cómo elegir a los líderes de la iglesia, y la conducta apropiada que deben tener los miembros de la iglesia, este capítulo se centra principalmente en las propias opciones espirituales personales de Timoteo. En particular, Pablo le pide que sea diligente, fiel y esté preparado, ya que era mucho lo que estaba en juego, tanto para Timoteo como para las personas que Dios quiso que dirigiera. Este capítulo hace hincapié en la importancia que tiene el hecho de desarrollar una buena práctica espiritual, lo cual es clave en base a los consejos que Pablo comparte antes y después de este pequeño pasaje.

El capítulo 4 de Timoteo sirve como puente entre la introducción de Pablo y la última parte de su carta. Durante los capítulos anteriores, Pablo nos describió los requisitos que los líderes de la iglesia deben cumplir y compartió una serie de instrucciones sobre la forma adecuada de comportarse dentro de la iglesia. Aquí, en el capítulo 4, Pablo le recuerda a Timoteo que no se dejara llevar por las falsas enseñanzas que estaban influenciado a su iglesia. Pablo le hace una advertencia a Pablo mientras que lo anima, lo cual se convierte en la base del resto del mensaje que Pablo quiere compartir con Timoteo. Durante los dos últimos capítulos, Pablo comparte con Timoteo una manera eficaz de identificar y evitar errores en su vida espiritual.

1 Timoteo es una de las tres "epístolas pastorales" que Pablo les escribió a dos personas específicas. Las otras cartas de Pablo, tal y como Romanos, Efesios y Colosenses, están dirigidas a una audiencia más amplia. En estas epístolas pastorales, Pablo les da consejos tanto a Timoteo como a Tito sobre cómo liderar mejor sus iglesias locales. Estas tres cartas se centran en cómo debe funcionar la iglesia y el tipo de líderes que deben dirigirla. 1 Timoteo, tal y como ocurre con 2 Timoteo y Tito, son cartas más personales, por tanto, son menos formales y sistemáticas que el resto. Pablo nos ayuda a entender la manera en que los pastores, los diáconos y los ancianos deben priorizar su tiempo y energía en la iglesia.