LBLA: Y oí una voz del cielo que decía: Escribe: “Bienaventurados los muertos que de aquí en adelante mueren en el Señor.” Sí — dice el Espíritu — para que descansen de sus trabajos, porque sus obras van con ellos.
NBLA: Entonces oí una voz del cielo que decía: “Escribe: ‘Bienaventurados los muertos que de aquí en adelante mueren en el Señor.’” “Sí,” dice el Espíritu, “para que descansen de sus trabajos, porque sus obras van con ellos.”
NVI: Entonces oí una voz del cielo, que decía: «Escribe: Dichosos los que de ahora en adelante mueren en el Señor». «Sí —dice el Espíritu—, ellos descansarán de sus fatigosas tareas, pues sus obras los acompañan».
RV1960: Oí una voz que desde el cielo me decía: Escribe: Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus trabajos, porque sus obras con ellos siguen.
JBS: Y oí una voz del cielo que me decía: Escribe: Bienaventurados son los muertos, que de aquí en adelante mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, que descansan de sus labores; y sus obras los siguen.