Efesios 5:11 - Printer Friendly

LBLA: Y no participéis en las obras estériles de las tinieblas, sino más bien, desenmascaradlas ;

NBLA: y no participen en las obras estériles de las tinieblas, sino más bien, desenmascárenlas (repróchenlas).

NVI: No tengan nada que ver con las obras infructuosas de la oscuridad, sino más bien denúncienlas,

RV1960: Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas;

JBS: Y no tengáis comunión con las obras infructuosas de las tinieblas; sino antes bien impugnadlas.

En este versículo, Pablo les ordena a los efesios dos cosas. En primer lugar, los creyentes deben evitar el pecado a toda costa. Lo que Pablo dice aquí implica que el pecado es una pérdida de tiempo y se asocia con la oscuridad, la cual se opone a la luz de los que viven por y para Cristo.

El segundo mandamiento enfatiza que, en realidad, no solo debemos evitar el pecado, sino que debemos denunciarlo. Debemos desenmascarar y señalar lo que es pecaminoso y denunciarlo. Esto no significa que debamos hablar gráficamente sobre ciertas acciones pecaminosas (Efesios 5:12). Sin embargo, los creyentes deben saber distinguir entre el bien y el mal y animar a los demás (y a sí mismos) para vivir de acuerdo con lo que es correcto. Hay muchas personas que piensan que los cristianos se pasan todo el día criticando a los demás, y eso no es cierto. Debemos juzgar las situaciones de una manera justa y humilde (Juan 7:24), ya que en realidad se nos ordena como creyentes que denunciemos el pecado para así beneficiar a los demás (Santiago 5:20).

Esta necesidad de exponer el pecado requiere que los creyentes eviten realizar determinadas acciones, y que se centren en la pureza de Dios y en la unidad dentro del cuerpo de Cristo. Los cristianos deben vivir sus vidas con cautela (Efesios 5:15), sabiduría (Efesios 5:15), sabiendo aprovecharse del tiempo que Dios les ha dado (Efesios 5:16), centrarse en la voluntad de Dios (Efesios 5:17) y reunirse con otros creyentes para adorar a Dios (Efesios 5:18–20).

En Efesios 5:1–21, Pablo continúa compartiendo una serie de valiosas enseñanzas acerca de cómo deben vivir su fe los cristianos. En lugar de imitar al mundo o dejarse dominar por las cosas mundanas, los cristianos deben estar llenos del Espíritu. Pablo los anima a desechar la inmoralidad sexual, las palabras groseras y la pérdida de tiempo. En cambio, los creyentes deben someterse los unos a los otros debido al respeto que le tenemos Cristo, para así poder ofrecerle un poderoso testimonio al mundo sobre quién es Dios y lo que ha hecho.

El capítulo 5 comienza con Pablo pidiéndoles a los efesios que imiten a Cristo. Para ello, los cristianos deben evitar la inmoralidad sexual, el lenguaje vulgar, la necedad y otras actitudes inapropiadas. Pablo les advierte que los que persisten en este tipo de comportamientos no forman parte del reino de Dios. Después de esto, Pablo habla sobre la importancia de que los cristianos se sometan los unos a los otros en Cristo, lo mismo que deben hacer los maridos con sus esposas y viceversa. Las esposas deben someterse a sus maridos y respetarlos. Los maridos deben amar a sus mujeres tal y como nos amó Cristo, con sacrificio y humildad.

El capítulo 5 forma parte de la segunda mitad del libro de Efesios, donde Pablo habla sobre la manera práctica en la que los cristianos deben vivir sus vidas. Durante el capítulo 4, Pablo se centró en animar a los cristianos a no vivir como si fueran incrédulos, sino que vivieran de una manera digna que glorificara a Dios. En el capítulo 5, Pablo nos ofrece una aplicación aún más clara de estos principios. Pablo habla sobre una serie de actitudes y hábitos impuros que los cristianos deben rechazar a toda costa. Luego habla sobre cómo debe desenvolverse un matrimonio cristiano, el cual debe estar basado en una clara comprensión Evangelio. Pablo seguirá dando consejos de este tipo durante capítulo 6 también. Todos estos consejos de Pablo culminan con una famosa analogía que trata sobre la manera en que los cristianos deben aplicar estos principios en su vida, utilizando el simbolismo de la armadura de un soldado de su época para hacerlo.

Pablo trata uno de sus temas más comunes en Efesios: la importancia de conectar la teoría con la práctica. En este libro, sin embargo, profundiza más en esto antes de hacer esta transición. Debido a que Pablo probablemente les escribió esta carta a más de una iglesia, Pablo se centra en la manera en que las creencias cristianas deben ponerse en práctica a través de nuestras acciones. Los tres primeros capítulos nos hablan de ideas espirituales, y los tres últimos nos muestran cómo deben aplicarse estas verdades en la vida de los creyentes que hayan alcanzado la madurez espiritual. Pablo se centra en el amor, la uni-dad de la Iglesia cristiana y el increíble valor de la salvación que hemos recibido por medio de Cristo.