Gálatas 4:13 - Printer Friendly

LBLA: pero sabéis que fue por causa de una enfermedad física que os anuncié el evangelio la primera vez ;

NBLA: Pero saben que fue por causa de una enfermedad física que les prediqué (anuncié) el evangelio la primera vez.

NVI: Como bien saben, la primera vez que les prediqué el evangelio fue debido a una enfermedad,

RV1960: Pues vosotros sabéis que a causa de una enfermedad del cuerpo os anuncié el evangelio al principio;

JBS: Que vosotros sabéis que por flaqueza de carne os anuncié el Evangelio al principio;

Pablo ha estado compartiendo una serie de ideas diferentes con los gálatas para que abandonaran cualquier esperanza de ser justificados ante Dios siguiendo la ley judía. En cambio, debían aceptar la verdad de que ya estaban plenamente justificados por su fe en Cristo. Esas dos ideas son simplemente incompatibles.

Pablo comenzó a compartir un nuevo pensamiento en el versículo anterior cuando dijo que, durante el tiempo que pasó con ellos, no le hicieron nada malo. Ahora desarrollará esa idea, recordándoles la profunda bondad que sintieron hacia él y de la manera en la que creyeron en lo que él les había enseñado acerca de Jesús. Pablo les preguntará enfáticamente: "¿qué ha cambiado entonces?"

Pablo comienza diciendo que les predicó por primera vez acerca de la fe en Cristo a causa de una "enfermedad del cuerpo". En realidad, no sabemos por este pasaje, ni por otros libros de la Biblia, cuál fue esta enfermedad, ni tampoco sabemos la manera en que una enfermedad pudo haber causado que Pablo le predicara a este grupo específico de personas. Los estudiosos de la Biblia especulan que tal vez Pablo llegó a su región para recuperarse de una enfermedad, tal y como malaria; o tal vez Pablo tenía la intención de pasar por su región, pero no pudo continuar porque se enfermó.

En cualquier caso, los lectores de Pablo habrían sabido exactamente lo que quiso decir. Ellos, junto con él, entendieron que Dios había usado la enfermedad de Pablo para proporcionarle la oportunidad de predicarles acerca de Jesús. Tal y como nos lo revelarán los siguientes versículos, los gálatas trataron a Pablo con bondad y lo cuidaron bien.

Gálatas 4:8–20 nos revela que los cristianos de Galacia ya habían comenzado a seguir la ley de Moisés de una manera legalista, incluso hasta el punto de llegar a observar días especiales. ¿Por qué querrían volver a la esclavitud siguiendo la ley para ser justificados ante Dios, pregunta Pablo? ¿Por qué pasaron de bendecirlo y confiar en Cristo a rechazarlo solo por el hecho de decir la verdad? Los falsos maestros solo los estaban usando para glorificarse a sí mismos, insiste Pablo. Pablo se angustia por ellos como una madre que da a luz a su hijo, y anhelaba ver a Cristo creciendo y formándose dentro de ellos.

En este capítulo, Pablo comparte una serie de ideas para enseñarles a sus lectores gálatas una lección muy importante. En primer lugar, no tiene sentido seguir la ley de Moisés para ser justos ante Dios, ya que la justificación viene solo por la fe en Cristo. Segundo, Pablo nos muestra que la llegada de Cristo hizo posible que todas las personas se convirtieran en hijos de Dios a través de la fe. Luego, Pablo comienza a preguntarse qué había cambiado para que los gálatas comenzaran a abandonar las enseñanzas del evangelio que Pablo había compartido con ellos. Finalmente, Pablo hace una alegoría de las Escrituras para ilustrar la diferencia que existe entre nacer en la esclavitud y nacer como parte de la promesa de la fe en Cristo.

Gálatas 3 termina con Pablo afirmando, una vez más, que las personas que están en Cristo son descendientes de Abrahán, tal y como lo era él, lo cual nos convierte en herederos de la promesa que Dios le hizo a Abrahán. Gálatas 4 continúa compartiendo esa idea, y nos muestra la manera en que la llegada de Cristo marcó el momento en que todas las personas podían recibir la herencia de Dios y ser adoptados en Su familia. Pablo usa un tono más personal y les pregunta a los gálatas por qué pasaron de bendecirlo a rechazar el mensaje de Cristo. El capítulo termina con una alegoría de Pablo sobre la diferencia que hay entre nacer en la esclavitud bajo la ley y nacer en libertad por el poder del Espíritu mediante la fe en Cristo. El capítulo 5 continuará profundizando en el tema de la libertad que tenemos en Cristo.

A Gálatas a veces se le llama "la versión corta de Romanos" por los temas que trata, tales como la justificación y la santificación por medio de la fe. Un grupo de cristianos conocidos como los “judaizantes” estaban predicando un evangelio basado en el legalismo, en lugar de en la gracia. El propósito principal de Pablo al escribirles la carta a los Gálatas fue reiterar la verdadera naturaleza del evangelio: que somos justificados (hechos justos) y santificados (nos parecemos a más y más a Cristo) solo a través de nuestra fe en Jesucristo. Esta carta probablemente fue escrita poco antes de que los ancianos de la iglesia en Jerusalén dijeran que estaban en contra de las enseñanzas de los judaizantes, lo cual hicieron durante el llamado “Concilio de Jerusalén”.