Génesis 25:6 - Printer Friendly

LBLA: y a los hijos de sus concubinas Abraham les dio regalos, viviendo aún él, y los envió lejos de su hijo Isaac hacia el este, a la tierra del oriente.

NBLA: A los hijos de sus concubinas Abraham les dio regalos, viviendo aún él, y los envió lejos de su hijo Isaac hacia el este, a la tierra del oriente.

NVI: A los hijos de sus concubinas les hizo regalos y, mientras él todavía estaba con vida, los separó de su hijo Isaac, enviándolos a las regiones orientales.

RV1960: Pero a los hijos de sus concubinas dio Abraham dones, y los envió lejos de Isaac su hijo, mientras él vivía, hacia el oriente, a la tierra oriental.

JBS: Y a los hijos de sus concubinas dio Abraham dones, y los envió de junto Isaac su hijo, mientras él vivió, al oriente, a la tierra oriental.

El versículo anterior nos dejó claro que Abrahán le había dado toda su gran riqueza a Isaac (Génesis 25:1–5). Además, las promesas del pacto de Dios también se establecieron únicamente a través de Isaac. Isaac era el hijo de la promesa. De hecho, la línea de descendientes que vino de Abrahán a través de Isaac fue la que finalmente resultaría en el pueblo escogido de Dios, Israel y, eventualmente, conduciría hacia Cristo mismo.

Sin embargo, Abrahán no dejó con las manos vacías a los hijos que tuvo con sus concubinas. Aunque nunca se le nombra exactamente como una "concubina", es posible que Agar también lo fuera (Génesis 16:1–3). Abrahán había mostrado un gran afecto por Ismael, el hijo que tuvo con Agar, e Ismael participará en el entierro de Abrahán durante los siguientes versículos. Cetura, la "otra esposa" que Abrahán había tenido después de Sara, es nombrada como una "concubina" en 1 Crónicas 1:32. En realidad, no se nos dice nada de ninguna otra mujer que pudiera haber sido considerada como otra concubina de Abrahán.

En cualquier caso, antes de que Abrahán muriera, Abrahán le dio regalos a cada uno de estos hijos y los envió lejos de Isaac. Abrahán tenía la intención de que Isaac permaneciera en la tierra prometida de Canaán y que no hubiera ningún tipo de confusión, incluso después de su muerte, acerca de quién era e iba a ser su único y verdadero heredero. Con ese fin, Abrahán envió a todos estos otros hijos hacia las regiones desérticas al este de lo que más tarde se convertiría en Israel.

Génesis 25:1–18 añade algunos detalles más antes de describir la muerte de Abrahán y luego de Ismael. Abrahán había tomado otra esposa, además de Sara, y en ese momento tenía seis hijos con ella. Abrahán les ofreció regalos a todos, y los envió hacia el este, ya que Isaac sería el único heredero verdadero de las promesas del pacto. Sin embargo, cuando Abrahán muere y es enterrado a la edad de 175 años, Ismael se une a Isaac para el funeral. Entonces, se enumeran a los 12 hijos de Ismael, junto con una descripción de la región en la que se establecieron sus tribus. Finalmente, Ismael también muere a la edad de 137 años.

Génesis 25 está repleto de información. Abrahán se casa con otra esposa, probablemente antes de que Sara muriera, y tiene seis hijos con ella. Abrahán murió a la edad de 175 años y fue enterrado tanto por Isaac como por Ismael en la cueva que era propiedad de la familia donde Sara había sido enterrada también. A continuación, se enumeran a los 12 hijos de Ismael, junto con la región en la que se establecieron sus tribus, al este de lo que más tarde se convertiría en Israel. Finalmente, Dios escuchó la oración de Isaac para que Rebeca se quedara embarazada y ella dio a luz a una pareja de mellizos: Jacob y Esaú, quienes acabarían enfrentándose entre sí.

El capítulo anterior nos contó la historia de cómo el criado de Abrahán encontró una esposa para Isaac entre el pueblo de Abrahán. Este capítulo se apresuró a completar los detalles del final de la vida de Abrahán antes de comenzar la historia de los años de Isaac como patriarca. Abrahán se casó con otra mujer y tuvo seis hijos con ella, a quienes decidió enviar lejos de Isaac. Abrahán murió y fue sepultado con Sara. Luego se enumeran a los 12 hijos de Ismael, y luego también se registra su muerte. Finalmente, los gemelos de Isaac nacieron en respuesta a la oración que Isaac le hizo al Señor.

El libro de Génesis establece verdades fundamentales sobre Dios. Entre estas verdades se encuentran Su papel como Creador, Su santidad, Su odio por el pecado, Su amor por la humanidad y Su disposición para proveer para nuestra redención. Gracias a Génesis, aprendemos no solo de dónde viene la humanidad, sino acerca de la razón por la que el mundo es de la manera que es en la actualidad. El libro también nos habla sobre la fundación de Israel, el pueblo elegido de Dios. Muchos de los principios que se ofrecen en otras partes de las Escrituras dependen de las ideas básicas que se nos presentan en el libro de Génesis. Dentro del marco narrativo de la Biblia, Génesis nos explica la historia del origen del universo, el cual nos conduce hacia el cautiverio de Israel en Egipto, lo cual hace las veces de trasfondo para el libro del Éxodo.