Génesis 49:23 - Printer Friendly

LBLA: Los arqueros lo atacaron con furor, lo asaetearon y lo hostigaron;

NBLA: Los arqueros lo atacaron con furor, Lo asaetearon y lo hostigaron;

NVI: Los arqueros lo atacaron sin piedad; le tiraron flechas, lo hostigaron.

RV1960: Le causaron amargura, Le asaetearon, Y le aborrecieron los arqueros;

JBS: Y le causaron amargura, y asaetearon, y le aborrecieron los señores de saetas;

En este pasaje se está prediciendo el futuro de las tribus de Israel (Génesis 35: 10–11), las cuales descienden de cada uno de los hijos de Jacob (Génesis 49:1–2). Después de profetizar sobre diez de sus hijos, Jacob llegó hasta los hijos de su amada esposa Raquel. Primero, comenzó con José. A su hijo predilecto (Génesis 37: 3) lo comparó con una rama fructífera que está situada cerca de un manantial (Génesis 49:22). A continuación, Jacob cambió el tono para enfatizar la capacidad que José tendría para defenderse de los ataques.

Estos comentarios expresan verdades a varios niveles diferentes. El mismo José había sido amargamente atacado durante su vida varias veces. Sus hermanos se burlaron de él y finalmente lo vendieron como esclavo (Génesis 37:18–36). Fue acusado falsamente de un intento de violación por la esposa de Potifar y encarcelado injustamente durante años (Génesis 39:11–20); y fue olvidado y abandonado por el copero del faraón (Génesis 40:23). En todos estos casos, José continuó "contraatacando" confiando en que Dios estaría con él.

La profecía de Jacob también parece mirar hacia adelante: el momento en el que dos tribus descendientes de José serían atacadas por los enemigos de Israel. Muchos de los guerreros renombrados del Antiguo Testamento, como Gedeón, Josué y Débora, vendrán de las tribus de Manasés y Efraín.

Génesis 49:22–27 incluye los comentarios proféticos finales de Jacob sobre sus hijos. Sus últimos dos hijos son los más pequeños, los únicos hijos naturales que le nacieron de Raquel, su esposa favorita. Los hijos de José ya se habían incluido en la bendición familiar (Génesis 48:5–6). Esta es, sin duda, la profecía más positiva de todas las profecías de Jacob. De Benjamín, al contrario, se predice que se convertiría en una tribu notablemente violenta.

Génesis 49 contiene los últimos comentarios proféticos de Jacob. En forma de poesía, Jacob pronuncia "bendiciones" positivas y negativas sobre cada uno de sus 12 hijos y las personas que vendrían de ellos. Rubén, Simeón y Leví deben rendir cuentas por sus pecados pasados. Judá se describe como un león; la línea real vendría de su pueblo. A José y a su descendencia se les ofrecen muchas bendiciones. Una vez que se completa el oráculo, Jacob les ordena a sus hijos que lo entierren con sus padres en Canaán. Finalmente, Israel (Génesis 35:10–11) exhala su último suspiro y muere.

Después de una vida de lucha y controversia, la familia de Jacob se asentó finalmente en Egipto. Génesis 48 nos habla de la bendición que Jacob puso sobre los dos hijos mayores de José: Efraín y Manasés. En Génesis 49, Jacob hizo algunas predicciones tanto positivas como negativas acerca de cada uno de sus hijos uno por uno. Jacob luego les ordenó a sus hijos que lo enterraran en Canaán. Después de eso, Jacob falleció. El capítulo final de Génesis nos describirá el luto de la familia y la muerte de José. Los versículos iniciales del libro del Éxodo avanzaron unos 400 años en el tiempo, un momento en que los israelitas se convirtieron en esclavos de los nuevos gobernantes egipcios (Éxodo 1:8–14).

El libro de Génesis establece verdades fundamentales sobre Dios. Entre estas verdades se encuentran Su papel como Creador, Su santidad, Su odio por el pecado, Su amor por la humanidad y Su disposición para proveer para nuestra redención. Gracias a Génesis, aprendemos no solo de dónde viene la humanidad, sino acerca de la razón por la que el mundo es de la manera que es en la actualidad. El libro también nos habla sobre la fundación de Israel, el pueblo elegido de Dios. Muchos de los principios que se ofrecen en otras partes de las Escrituras dependen de las ideas básicas que se nos presentan en el libro de Génesis. Dentro del marco narrativo de la Biblia, Génesis nos explica la historia del origen del universo, el cual nos conduce hacia el cautiverio de Israel en Egipto, lo cual hace las veces de trasfondo para el libro del Éxodo.