Génesis 9:1 - Printer Friendly

LBLA: Y bendijo Dios a Noé y a sus hijos, y les dijo: Sed fecundos y multiplicaos, y llenad la tierra.

NBLA: Y Dios bendijo a Noé y a sus hijos, y les dijo: “Sean fecundos y multiplíquense, y llenen la tierra.

NVI: Dios bendijo a Noé y a sus hijos con estas palabras: «Sean fecundos, multiplíquense y llenen la tierra.

RV1960: Bendijo Dios a Noé y a sus hijos, y les dijo: Fructificad y multiplicaos, y llenad la tierra.

JBS: Y bendijo Dios a Noé y a sus hijos, y les dijo: Fructificad, y multiplicaos, y llenad la tierra;

Génesis 9 comienza con una bendición de Dios y una orden de Dios para las personas que habían sobrevivido al diluvio. Esta bendición es similar a la bendición que Dios le ofrece a la humanidad en Génesis 1:28 y Génesis 5:2. Esta es también la tercera vez en las Escrituras que Dios le ordena a la humanidad que fuera fructífera, se multiplicara y llenara la tierra (Génesis 1:28; 8:17). En un sentido muy real, esta bendición muestra que Dios está comenzando de nuevo con Noé tal y como ya lo hizo con Adán.

Esta vez, sin embargo, habrá diferencias específicas que se establecen desde el comienzo de este reinicio de la relación de Dios con la humanidad. Entre estas diferencias veremos que habrá órdenes ligeramente diferentes con respecto a la comida y las consecuencias del asesinato, por ejemplo. La tendencia de los animales a temer a los seres humanos y huir de ellos también se menciona durante este pasaje.

Anteriormente, Dios dijo que los animales del arca estaban destinados a repoblar la tierra que había sido devastada por el diluvio (Génesis 8:17). Ahora, la orden de Dios para Noé y sus hijos les presenta el mayor y más importante objetivo que tenían que cumplir: reproducirse.

Génesis 9:1–17 continúa describiendo la primera interacción de Dios con Noé y sus hijos después del diluvio. Primero, Dios los bendice y les da instrucciones específicas sobre cómo vivir en este "nuevo" mundo. Dios les ordena reproducirse y llenar la tierra, entre otras cosas. A continuación, Dios establece Su pacto unilateral de no destruir la vida en la tierra con un diluvio nunca más, y les ofrece el arco iris como señal de esta promesa.

El capítulo 9 describe la primera interacción que Dios tiene con Noé y sus hijos después del diluvio. Primero, Dios los bendice y les da instrucciones específicas sobre cómo vivir en este "nuevo" mundo. Dios les ordena reproducirse y llenar la tierra, entre otras cosas. A continuación, Dios establece Su pacto unilateral de no terminar nunca más con la vida en la tierra con un diluvio, y les ofrece el arco iris como señal de esta promesa. Finalmente, Noé profetiza sobre el futuro de los descendientes de sus hijos. Todo esto ocurre después de un incómodo episodio en el que Cam les cuenta a sus hermanos que había visto a Noé desmayarse borracho y completamente desnudo.

Los capítulos 6, 7 y 8 describen la manera en que Dios destruyó el mundo con un diluvio. Ahora, en Génesis 9, las Escrituras describen la relación que Dios tuvo con Noé y sus hijos después del diluvio. Primero, Dios los bendijo y les dio instrucciones específicas, incluida la orden de llenar la tierra. A continuación, Dios amplió Su promesa de no volver a eliminar la vida en la tierra con un diluvio. Finalmente, Noé maldijo a Cam y bendijo a Sem y Jafet después de que Cam les contara a sus hermanos que vio a Noé desmayarse borracho mientras estaba desnudo. Los capítulos 10 y 11 harán un esquema de transición de la historia de la humanidad que irá desde Noé hasta Abrahán.

El libro de Génesis establece verdades fundamentales sobre Dios. Entre estas verdades se encuentran Su papel como Creador, Su santidad, Su odio por el pecado, Su amor por la humanidad y Su disposición para proveer para nuestra redención. Gracias a Génesis, aprendemos no solo de dónde viene la humanidad, sino acerca de la razón por la que el mundo es de la manera que es en la actualidad. El libro también nos habla sobre la fundación de Israel, el pueblo elegido de Dios. Muchos de los principios que se ofrecen en otras partes de las Escrituras dependen de las ideas básicas que se nos presentan en el libro de Génesis. Dentro del marco narrativo de la Biblia, Génesis nos explica la historia del origen del universo, el cual nos conduce hacia el cautiverio de Israel en Egipto, lo cual hace las veces de trasfondo para el libro del Éxodo.