Mateo 19:5 - Printer Friendly

LBLA: y añadió: “POR ESTA RAZON EL HOMBRE DEJARA A su PADRE Y A su MADRE Y SE UNIRA A SU MUJER, Y LOS DOS SERAN UNA SOLA CARNE ”?

NBLA: y dijo: ‘POR ESTA RAZON EL HOMBRE DEJARA A su PADRE Y A su MADRE Y SE UNIRA A SU MUJER, Y LOS DOS SERAN UNA SOLA CARNE’?

NVI: y dijo: “Por eso dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su esposa, y los dos llegarán a ser un solo cuerpo”?

RV1960: y dijo: Por esto el hombre dejará padre y madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne?

JBS: Y dijo: Por tanto, el hombre dejará padre y madre, y se unirá a su mujer, y serán dos en una carne.

Jesús está respondiendo a la pregunta de unos fariseos que lo están poniendo a prueba y tratando de hacerlo cometer un error. Quieren que Él diga algo controvertido sobre el divorcio, un tema del que era difícil de hablar en esa época. Esperaban que cualquier respuesta que diera dañara su reputación y, tal vez, les diera motivos para considerarlo como un hereje (Mateo 19:1–4).

Jesús citó Génesis 1:27 en el versículo anterior: Dios creó al hombre y a la mujer. Ahora Jesús cita Génesis 2:24, el cual habla de un hombre y una mujer que se unen en matrimonio. Jesús, por supuesto, sabe que los fariseos habían leído estos pasajes. La idea que quiere compartir es que aquellos que lidian con el divorcio a la ligera en realidad no valoran lo que Dios les había revelado primero.

En el siguiente versículo, Jesús terminará de contestarles a estos líderes religiosos. Sin embargo, Jesús ya les ha mostrado que Dios estableció el matrimonio desde el principio de la creación, y está integrado como parte del dualismo hombre/mujer desde el diseño de la humanidad. El matrimonio es algo que va más allá de dos personas que se juntan para vivir juntos, sino que es la unión de dos personas que acaban formando una sola carne. Esto sucede, en parte, a través del sexo, pero también a través del compromiso integrado que existe después de crear una conexión matrimonial.

Debido a que eso es cierto, ¿qué significa entonces el hecho de romper esa unión con el divorcio? Jesús revela lo que Dios piensa sobre esto durante el siguiente versículo.

En Mateo 19:1–12, Jesús responde a una pregunta de los fariseos acerca del divorcio. Después de establecer que el matrimonio fue diseñado por Dios durante la creación del mundo para que durara toda la vida, Jesús insiste en que el divorcio es ilegal excepto en el caso en el que haya algún tipo de inmoralidad sexual. Los discípulos sugieren que, en ese caso, entonces sería mejor no casarse. Jesús dice que eso no es cierto, y que una vida de celibato es solo posible para ciertas personas, tales como los eunucos.

Los fariseos le preguntan a Jesús si es lícito que un hombre se divorcie de su esposa por cualquier causa. Jesús les recuerda que el matrimonio fue diseñado por Dios durante la creación. El divorcio, por eso, es lícito sólo en el caso de que se cometiera algún tipo de inmoralidad sexual. Un joven rico le pregunta a Jesús qué debe hacer para alcanzar la vida eterna. Jesús insiste en que sólo Dios es bueno. Entonces, Jesús desafía la sinceridad del hombre pidiéndole que les diera todas sus riquezas a los pobres y que lo siguiera. El hombre finalmente se niega a hacerlo, lo que demuestra lo fácil que es preferir las riquezas a vivir en total dependencia de Dios. Jesús les dice a Sus discípulos que la salvación es inalcanzable a través de nuestros esfuerzos, y que Dios es el único que nos la puede ofrecer.

Mateo 19 continúa con las enseñanzas de Jesús sobre la tentación y el perdón que ya comenzaron en el capítulo 18. Este pasaje comienza con Jesús dejando atrás Galilea y dirigiéndose hacia Jerusalén por el camino más largo. Jesús les dijo a los fariseos que el divorcio era legal solo en casos de inmoralidad sexual. Jesús bendijo a los niños pequeños y luego respondió a un joven rico que le preguntó cómo alcanzar la vida eterna. El hombre se fue de allí muy triste, porque Jesús le dijo que le diera todo su dinero a los pobres y lo siguiera. Jesús dijo que la salvación es imposible para los hombres, pero no para Dios. El capítulo 20 contiene parábolas y más ejemplos en forma de parábolas, y es el último capítulo antes de que Jesús llegara a Jerusalén durante los días previos a Su crucifixión.

El Evangelio de Mateo nos muestra claramente la influencia judía de Mateo y su deseo de alcanzar a una audiencia específica: los judíos. Mateo era uno de los doce discípulos de Jesús, un hombre judío y ex recaudador de impuestos. Desempeñar esta profesión habría requerido saber escribir y leer bien, y es posible que Mateo transcribiera algunas de las palabras de Jesús tal y como Jesús las dijo. Este libro está lleno de referencias que citan el Antiguo Testamento, para así demostrarle a Israel que Jesús fue y es el Mesías Prometido. Mateo también menciona el uso de monedas durante muchos de los ejemplos que Jesús les enseñó a Sus discípulos, probablemente debido a que fue un recaudador de impuestos antes de hacerse discípulo de Jesús. Mateo registra extensos relatos de las enseñanzas de Jesús, los cuales son mucho más largos que los que aparecen en los otros tres Evangelios.