Capítulo
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13
Verso
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21

2 Corintios 12:8

LBLA Acerca de esto, tres veces he rogado al Señor para que lo quitara de mí.
NBLA Acerca de esto, tres veces he rogado al Señor para que lo quitara de mí.
NVI Tres veces le rogué al Señor que me la quitara;
RV1960 respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí.
JBS Por lo cual tres veces he rogado al Señor, que se quite de mí.

¿Qué significa 2 Corintios 12:8?

Una de las mentiras más antiguas y peligrosas que se cuentan sobre el evangelio es que el cristianismo trae consigo éxitos terrenales (1 Timoteo 6:3–5). Los maestros de la prosperidad y los curanderos continuamente afirman que cualquier tipo de problema puede eliminarse si tenemos suficiente fe. Sin embargo, no hay absolutamente ningún tipo de apoyo bíblico para esta manera de pensar. De hecho, pasajes como este demuestran exactamente lo contrario. Incluso los cristianos más fieles, sinceros y comprometidos experimentan dificultades, persecuciones (Juan 15:19) o enfermedades (2 Corintios 5:2–6). Por tanto, todo el mundo pasa por momentos difíciles más allá de que esa persona sea creyente o no lo sea (Juan 9:1–3).

Las personas que siguen la falsa doctrina de la "palabra de fe" acaban desilusionándose de una manera u otra. Los falsos maestros les dicen a los conversos que el cristianismo les traerá salud, riqueza y prosperidad. Entonces, cuando esa promesa se desmorona, sus seguidores se culpan a sí mismos o culpan su percepción distorsionada de la fe. Eso los conduce al desánimo, en el mejor de los casos, y a la apostasía, en el peor. De hecho, Cristo, dijo que los problemas son parte de esta vida para que, entre otras cosas, la gente evitara pensar de esa manera (Juan 16:33).

Pablo tenía un "aguijón en el cuerpo" que le surgió mientras tuvo esa increíble experiencia en el paraíso. Este aguijón podría haber sido algún tipo de condición física, angustia emocional, o angustia mental. Sin embargo, sería absurdo afirmar que a Pablo le faltaba fe, pero aun así siguió sufriendo. Sea lo que fuere, pareció ser bastante incómodo para Pablo. Probablemente incluso llegó a ralentizar el ministerio de Pablo, al menos desde su punto de vista. Por lo tanto, le rogó a Dios tres veces que se lo quitara, pero Dios se lo negó.

Pablo nos revela en el siguiente versículo la razón por la que Dios se negó a quitarle este aguijón a Pablo. La voluntad de Dios era que Pablo sufriera de esa manera para aprender algo que no habría podido aprender de ninguna otra manera. El comentario que aparece al final del versículo 7 nos explica la razón que Dios tuvo para permitir que ocurriera todo esto: que Pablo siguiera siendo humilde.
Expand
Expand
Expand
¿Qué es el evangelio?
Download the app:
BibleRef.com is a ministry of