Amós capitulo 7
La Biblia de las Américas
2Y sucedió que cuando habían terminado de devorar la hierba de la tierra, yo dije: Señor DIOS, perdona, te ruego. ¿Cómo podrá resistir Jacob si es tan pequeño ? 3Se apiadó el SEÑOR de esto: No sucederá — dijo el SEÑOR.
5Entonces dije: Señor DIOS, cesa, te ruego. ¿Cómo podrá resistir Jacob si es tan pequeño ? 6Se apiadó el SEÑOR de esto: Esto tampoco sucederá — dijo el Señor DIOS.
8Y el SEÑOR me dijo: ¿Qué ves, Amós ? Y respondí: Una plomada. Entonces el Señor dijo: He aquí, pondré una plomada en medio de mi pueblo Israel. Ya no volveré a dejarlos sin castigo. 9Los lugares altos de Isaac serán asolados y los santuarios de Israel destruidos ; y yo me levantaré con espada contra la casa de Jeroboam.
10Entonces Amasías, sacerdote de Betel, envió palabra a Jeroboam, rey de Israel, diciendo: Amós conspira contra ti en medio de la casa de Israel; la tierra ya no puede soportar todas sus palabras. 11Porque así dice Amós: “Jeroboam morirá a espada y ciertamente Israel saldrá en cautiverio de su tierra.” 12Y Amasías dijo a Amós: Vete, vidente, huye a la tierra de Judá, come allí pan y allí profetiza; 13pero en Betel no vuelvas a profetizar más, porque es santuario del rey y residencia real.
14Entonces respondió Amós y dijo a Amasías: Yo no soy profeta, ni hijo de profeta, sino que soy boyero y cultivador de sicómoros. 15Pero el SEÑOR me tomó cuando pastoreaba el rebaño, y me dijo: Ve, profetiza a mi pueblo Israel. 16Ahora pues, escucha la palabra del SEÑOR: Tú dices: “No profetices contra Israel ni hables contra la casa de Isaac.” 17Por tanto, así dice el SEÑOR: “Tu mujer se prostituirá en la ciudad, tus hijos y tus hijas caerán a espada, tu tierra será repartida a cordel, y tú morirás en una tierra inmunda. Y ciertamente Israel saldrá de su tierra en cautiverio.”
Nueva Biblia de las Américas
2Sucedió que cuando habían terminado de devorar la hierba de la tierra, yo dije: “Señor DIOS, Te ruego que perdones. ¿Cómo podrá resistir Jacob Si es tan pequeño?” 3El SEÑOR se apiadó de esto: “No sucederá,” dijo el SEÑOR.
5Entonces dije: “Señor DIOS, Te ruego que ceses. ¿Cómo podrá resistir Jacob Si es tan pequeño?” 6El SEÑOR se apiadó de esto: “Esto tampoco sucederá,” dijo el Señor DIOS.
8Y el SEÑOR me dijo: “¿Qué ves, Amós?” “Una plomada,” le respondí. Entonces el Señor dijo: “Voy a poner una plomada En medio de Mi pueblo Israel. Ya no volveré a dejarlos sin castigo. 9Los lugares altos de Isaac serán asolados Y los santuarios de Israel destruidos; Y Yo me levantaré con espada contra la casa de Jeroboam.”
10Entonces Amasías, sacerdote de Betel (Casa de Dios), envió palabra a Jeroboam, rey de Israel: “Amós conspira contra ti en medio de la casa de Israel; la tierra ya no puede soportar todas sus palabras. 11Porque así dice Amós: ‘Jeroboam morirá a espada y ciertamente Israel saldrá en cautiverio de su tierra.’” 12Entonces Amasías dijo a Amós: “Vete, vidente, huye a la tierra de Judá, come allí pan y allí profetiza. 13Pero en Betel no vuelvas a profetizar más, porque es santuario del rey y residencia real.”
14Entonces Amós le respondió a Amasías: “Yo no soy profeta, ni hijo de profeta, sino que soy boyero y cultivador de higueras. 15Pero el SEÑOR me tomó cuando pastoreaba el rebaño, y me dijo: ‘Ve, profetiza a Mi pueblo Israel.’ 16Ahora pues, escucha la palabra del SEÑOR: Tú dices: ‘No profetices contra Israel ni hables contra la casa de Isaac.’ 17Por tanto, así dice el SEÑOR: ‘Tu mujer se prostituirá en la ciudad, tus hijos y tus hijas caerán a espada, tu tierra será repartida a cordel, y tú morirás en una tierra inmunda. Además, Israel ciertamente saldrá de su tierra en cautiverio.’”
Nueva Versión Internacional
8Y el SEÑOR me preguntó: ?¿Qué ves, Amós? ?Una cuerda de plomada —respondí. Entonces el Señor dijo: ?Mira, voy a tirar la plomada en medio de mi pueblo Israel; no volveré a perdonarlo. 9»Los altares paganos de Isaac serán destruidos, y arruinados los santuarios de Israel; me levantaré con espada contra el palacio de Jeroboán».
12Entonces Amasías le dijo a Amós: ?¡Largo de aquí, vidente! ¡Si quieres ganarte el pan profetizando, vete a la tierra de Judá! 13No vuelvas a profetizar en Betel, porque este es el santuario del rey; es el templo del reino.
Reina-Valera 1960
1Así me ha mostrado Jehová el Señor: He aquí, él criaba langostas cuando comenzaba a crecer el heno tardío; y he aquí era el heno tardío después de las siegas del rey. 2Y aconteció que cuando acabó de comer la hierba de la tierra, yo dije: Señor Jehová, perdona ahora; ¿quién levantará a Jacob? porque es pequeño. 3Se arrepintió Jehová de esto: No será, dijo Jehová.
4Jehová el Señor me mostró así: He aquí, Jehová el Señor llamaba para juzgar con fuego; y consumió un gran abismo, y consumió una parte de la tierra. 5Y dije: Señor Jehová, cesa ahora; ¿quién levantará a Jacob? porque es pequeño. 6Se arrepintió Jehová de esto: No será esto tampoco, dijo Jehová el Señor.
7Me enseñó así: He aquí el Señor estaba sobre un muro hecho a plomo, y en su mano una plomada de albañil. 8Jehová entonces me dijo: ¿Qué ves, Amós? Y dije: Una plomada de albañil. Y el Señor dijo: He aquí, yo pongo plomada de albañil en medio de mi pueblo Israel; no lo toleraré más. 9Los lugares altos de Isaac serán destruidos, y los santuarios de Israel serán asolados, y me levantaré con espada sobre la casa de Jeroboam.
10Entonces el sacerdote Amasías de Bet-el envió a decir a Jeroboam rey de Israel: Amós se ha levantado contra ti en medio de la casa de Israel; la tierra no puede sufrir todas sus palabras. 11Porque así ha dicho Amós: Jeroboam morirá a espada, e Israel será llevado de su tierra en cautiverio. 12Y Amasías dijo a Amós: Vidente, vete, huye a tierra de Judá, y come allá tu pan, y profetiza allá; 13y no profetices más en Bet-el, porque es santuario del rey, y capital del reino.
14Entonces respondió Amós, y dijo a Amasías: No soy profeta, ni soy hijo de profeta, sino que soy boyero, y recojo higos silvestres. 15Y Jehová me tomó de detrás del ganado, y me dijo: Ve y profetiza a mi pueblo Israel. 16Ahora, pues, oye palabra de Jehová. Tú dices: No profetices contra Israel, ni hables contra la casa de Isaac. 17Por tanto, así ha dicho Jehová: Tu mujer será ramera en medio de la ciudad, y tus hijos y tus hijas caerán a espada, y tu tierra será repartida por suertes; y tú morirás en tierra inmunda, e Israel será llevado cautivo lejos de su tierra.
Biblia del Jubileo
1El Señor DIOS me mostró así; y he aquí, él criaba langostas al principio que comenzaba a crecer el heno tardío; y he aquí que el heno tardío creció después de las siegas del rey. 2Y acaeció que como acabó de comer la hierba de la tierra, yo dije: Señor DIOS, perdona ahora; ¿quién levantará a Jacob? Porque es pequeño. 3Se arrepintió el SEÑOR de esto: No será, dijo el SEÑOR. 4El Señor DIOS después me mostró así: y he aquí, llamaba para juzgar por fuego el Señor DIOS; y consumió un gran abismo, y consumió la heredad. 5Y dije: Señor DIOS, cesa ahora; ¿quién levantará a Jacob? Porque es pequeño. 6Se arrepintió el SEÑOR de esto: No será esto tampoco, dijo el Señor DIOS. 7Me enseñó también así: He aquí, el Señor estaba sobre un muro edificado a plomada de albañil, y tenía en su mano una plomada de albañil. 8Y el SEÑOR entonces me dijo: ¿Qué ves, Amós? Y dije: Una plomada de albañil. Y el Señor dijo: He aquí, Yo pongo plomada de albañil en medio de mi pueblo Israel. Nunca más le pasaré; 9y los altares de Isaac serán destruidos, y los santuarios de Israel serán asolados; y me levantaré con espada sobre la casa de Jeroboam.
10Entonces Amasías sacerdote de Bet-el envió a decir a Jeroboam, rey de Israel: Amós se ha conjurado contra ti en medio de la Casa de Israel; la tierra no puede ya sufrir todas sus palabras. 11Porque así ha dicho Amós: Jeroboam morirá a cuchillo, e Israel pasará de su tierra en cautiverio. 12Y Amasías dijo a Amós: Vidente, vete, y huye a tierra de Judá, y come allá tu pan, y profetiza allá; 13y no profetices más en Bet-el, porque es santuario del rey, y cabecera del reino. 14Entonces respondió Amós, y dijo a Amasías: No soy profeta, ni soy hijo de profeta, sino que soy boyero, y cogedor de higos silvestres; 15y el SEÑOR me tomó detrás del ganado, y me dijo el SEÑOR: Ve, y profetiza a mi pueblo Israel. 16Ahora, pues, oye palabra del SEÑOR. Tú dices: No profetices contra Israel, ni hables contra la casa de Isaac: 17Por tanto, así dijo el SEÑOR: Tu mujer fornicará en la ciudad, y tus hijos y tus hijas caerán a cuchillo, y tu tierra será partida por suertes; y tú morirás en tierra inmunda, e Israel será traspasado de su tierra.