Visión general de Cantares
Tipo de libro: El sexto libro de la Sabiduría; el libro vigésimo segundo del Antiguo Testamento; el vigésimo segundo libro de la Biblia.
Autor: El rey Salomón, nombrado específicamente siete veces como su autor (Cantar de los Cantares 1:1) o como uno de los personajes principales (Cantar de los Cantares 1:5; 3:7, 9, 11; 8:11, 12).
Audiencia: La audiencia original de Salomón eran aquellos judíos que vivían por todo Israel durante su reinado. Este libro fue claramente escrito para hombres y mujeres adultos que reconocían los aspectos emocionales del amor y el romance. Salomón enfatiza el interés mutuo que ocurre entre una pareja antes del matrimonio. Sin embargo, la intimidad sexual no se discute hasta que la pareja central de la narración comparte su noche de bodas.
Fecha: El cantar de los cantares fue escrito durante el reinado de Salomón entre aproximadamente los años 970—931 a.C.
Resumen: El cantar de los cantares de Salomón incluye ocho capítulos que se pueden organizar en tres secciones principales. La primera sección aborda el cortejo entre el hombre y la mujer (Cantares 1:1—3:5). La mujer confiesa su amor (Cantares 1:2–7), mientras que Salomón y la mujer se hablan románticamente (Cantares 1:8—2:7). La mujer le expresa su adoración a Salomón (Cantar de los Cantares 2:8—3:5), y describe un sueño muy real que ha tenido sobre su relación (3:1—5).
La segunda sección involucra la boda de los dos amantes (Cantar de los Cantares 3:6—5:1). El novio llega con gran esplendor (Cantar de los Cantares 3:6–11). Se lleva a cabo la boda y la discusión se intensifica hasta llegar a la primera noche que los dos pasan juntos después de casarse (Cantar de los Cantares 4:1—5:1).
La tercera sección se centra en varios aspectos de la vida matrimonial, abordando tres áreas principales. Primero, la pareja tiene una discusión (Cantares 5:2—6:3). En segundo lugar, los amantes resuelven su conflicto y rápidamente restauran el deseo que sienten el uno por el otro (Cantar de los Cantares 6:4—8:4). Los versículos finales tratan sobre las diferentes áreas en las que los dos tienen que trabajar juntos (Cantar de los Cantares 8:5–14).
Históricamente, algunos intérpretes han intentado entender el libro de una manera figurativa debido al énfasis que se hace tanto en el romance como en la sexualidad. Los eruditos judíos a veces han entendido que este relato intenta hablar del amor que existe entre Dios y Su pueblo elegido. Los cristianos a menudo han preferido una interpretación más alegórica que se refiere a la relación que Cristo tiene con Su iglesia, a quien se la considera la novia de Cristo.
Aunque estas perspectivas son interesantes, no es necesario adoptar un enfoque tan alegórico para comprender el mensaje primordial del Cantar de los Cantares. Una lectura directa del texto destaca cosas como la importancia del amor íntimo entre el esposo y la esposa dentro del contexto del matrimonio que Dios mismo ha diseñado, tal y como Dios lo creó originalmente.
Versículos clave (RVC)
Cantar de los Cantares 2:7: Yo os conjuro, oh doncellas de Jerusalén, Por los corzos y por las ciervas del campo, Que no despertéis ni hagáis velar al amor, Hasta que quiera.
Cantar de los Cantares 5:1: Yo vine a mi huerto, oh hermana, esposa mía; He recogido mi mirra y mis aromas; He comido mi panal y mi miel, Mi vino y mi leche he bebido. Comed, amigos; bebed en abundancia, oh amados.
Cantar de los Cantares 8:6–7: Ponme como un sello sobre tu corazón, como una marca sobre tu brazo; Porque fuerte es como la muerte el amor; Duros como el Seol los celos; Sus brasas, brasas de fuego, fuerte llama. Las muchas aguas no podrán apagar el amor, Ni lo ahogarán los ríos. Si diese el hombre todos los bienes de su casa por este amor, De cierto lo menospreciarían.