Esdras capitulo 10
La Biblia de las Américas
1Mientras Esdras oraba y hacía confesión, llorando y postrándose delante de la casa de Dios, una gran asamblea de Israel, hombres, mujeres y niños se juntó a él; y el pueblo lloraba amargamente. 2Y Secanías, hijo de Jehiel, uno de los hijos de Elam, respondió, y dijo a Esdras: Hemos sido infieles a nuestro Dios, y nos hemos casado con mujeres extranjeras de los pueblos de esta tierra ; pero todavía hay esperanza para Israel a pesar de esto. 3Hagamos ahora un pacto con nuestro Dios de despedir a todas las mujeres y a sus hijos, conforme al consejo de mi señor y de los que tiemblan ante el mandamiento de nuestro Dios ; y que sea hecho conforme a la ley. 4Levántate, porque este asunto es tu responsabilidad, pero estaremos contigo; anímate y hazlo.
5Esdras se levantó e hizo jurar a los principales sacerdotes, a los levitas y a todo Israel que harían conforme a esta propuesta ; y ellos juraron. 6Después se levantó Esdras de delante de la casa de Dios y entró a la cámara de Johanán, hijo de Eliasib. Aunque entró allí, no comió pan ni bebió agua, porque hacía duelo a causa de la infidelidad de los desterrados. 7E hicieron una proclama en Judá y Jerusalén a todos los desterrados para que se reunieran en Jerusalén, 8y a cualquiera que no viniera dentro de tres días, conforme al consejo de los jefes y de los ancianos, le serían confiscadas todas sus posesiones y él mismo sería excluido de la asamblea de los desterrados.
9Se reunieron, pues, todos los hombres de Judá y Benjamín en Jerusalén dentro de los tres días. Era el mes noveno, el día veinte del mes, y todo el pueblo se sentó en la plaza delante de la casa de Dios, temblando a causa de este asunto y de la intensa lluvia. 10Entonces se levantó el sacerdote Esdras y les dijo: Vosotros habéis sido infieles y os habéis casado con mujeres extranjeras añadiendo así a la culpa de Israel. 11Ahora pues, confesad al SEÑOR, Dios de vuestros padres, y haced su voluntad ; separaos de los pueblos de esta tierra y de las mujeres extranjeras. 12Y toda la asamblea respondió, y dijo a gran voz: ¡Está bien! Tal como has dicho es nuestro deber hacer. 13Sólo que el pueblo es numeroso, y es la temporada de lluvia, y no podemos permanecer fuera. Tampoco se puede hacer todo en un solo día ni en dos, porque hemos pecado en gran manera en este asunto. 14Que nuestros jefes representen toda la asamblea y que todos aquellos en nuestras ciudades que se han casado con mujeres extranjeras vengan en tiempos señalados, junto con los ancianos y jueces de cada ciudad, hasta que la tremenda ira de nuestro Dios a causa de este asunto se aparte de nosotros. 15Solamente Jonatán, hijo de Asael, y Jahazías, hijo de Ticva, se opusieron a esto, con Mesulam y el levita Sabetai respaldándolos.
16Pero los desterrados sí lo hicieron. Y el sacerdote Esdras designó a hombres jefes de casas paternas por cada una de sus casas paternas, todos ellos por nombre. Y se reunieron el primer día del décimo mes para investigar el asunto. 17Terminaron de investigar a todos los hombres que se habían casado con mujeres extranjeras el primer día del mes primero.
18Entre los hijos de los sacerdotes que se habían casado con mujeres extranjeras se encontraron, de los hijos de Jesúa, hijo de Josadac, y de sus hermanos: Maasías, Eliezer, Jarib y Gedalías. 19(Ellos juraron despedir a sus mujeres, y siendo culpables, ofrecieron un carnero del rebaño por su delito.) 20De los hijos de Imer: Hananí y Zebadías; 21de los hijos de Harim: Maasías, Elías, Semaías, Jehiel y Uzías; 22de los hijos de Pasur: Elioenai, Maasías, Ismael, Natanael, Jozabad y Elasa.
25También entre los de Israel: de los hijos de Paros : Ramía, Jezías, Malquías, Mijamín, Eleazar, Malquías y Benaía; 26de los hijos de Elam: Matanías, Zacarías, Jehiel, Abdi, Jeremot y Elías; 27de los hijos de Zatu : Elioenai, Eliasib, Matanías, Jeremot, Zabad y Aziza; 28de los hijos de Bebai: Johanán, Hananías, Zabai y Atlai; 29de los hijos de Bani: Mesulam, Maluc, Adaía, Jasub, Seal y Ramot; 30de los hijos de Pahat-moab: Adna, Quelal, Benaía, Maasías, Matanías, Bezaleel, Binúi y Manasés; 31de los hijos de Harim: Eliezer, Isías, Malquías, Semaías, Simeón, 32Benjamín, Maluc y Semarías; 33de los hijos de Hasum: Matenai, Matata, Zabad, Elifelet, Jeremai, Manasés y Simei; 34de los hijos de Bani: Madai, Amram, Uel, 35Benaía, Bedías, Quelúhi, 36Vanías, Meremot, Eliasib, 37Matanías, Matenai, Jaasai, 38Bani, Binúi, Simei, 39Selemías, Natán, Adaía, 40Macnadebai, Sasai, Sarai, 41Azareel, Selemías, Semarías, 42Salum, Amarías y José; 43de los hijos de Nebo : Jeiel, Matatías, Zabad, Zebina, Jadau, Joel y Benaía. 44Todos éstos se habían casado con mujeres extranjeras, y algunos de ellos tenían mujeres que les habían dado a luz hijos.
Nueva Biblia de las Américas
1Mientras Esdras oraba y hacía confesión, llorando y postrándose delante de la casa de Dios, una gran asamblea de Israel, hombres, mujeres y niños se juntó a él; y el pueblo lloraba amargamente. 2Y Secanías, hijo de Jehiel, uno de los hijos de Elam, dijo a Esdras: “Hemos sido infieles a nuestro Dios, y nos hemos casado con mujeres extranjeras de los pueblos de esta tierra; pero todavía hay esperanza para Israel a pesar de esto. 3Hagamos ahora un pacto con nuestro Dios de despedir a todas las mujeres y a sus hijos, conforme al consejo de mi señor y de los que tiemblan ante el mandamiento de nuestro Dios; y que sea hecho conforme a la ley. 4Levántate, porque este asunto es tu responsabilidad, pero estaremos contigo; anímate y hazlo.”
5Esdras se levantó e hizo jurar a los principales sacerdotes, a los Levitas y a todo Israel que harían conforme a esta propuesta; y ellos lo juraron. 6Después Esdras se levantó de delante de la casa de Dios y entró a la cámara de Johanán, hijo de Eliasib. Aunque entró allí, no comió pan ni bebió agua, porque hacía duelo a causa de la infidelidad de los desterrados. 7Entonces hicieron una proclama en Judá y Jerusalén a todos los desterrados para que se reunieran en Jerusalén, 8y a cualquiera que no viniera dentro de tres días, conforme al consejo de los jefes y de los ancianos, le serían confiscadas todas sus posesiones y él mismo sería excluido de la asamblea de los desterrados.
9Se reunieron, pues, todos los hombres de Judá y Benjamín en Jerusalén dentro de los tres días. Era el mes noveno, el día veinte del mes, y todo el pueblo se sentó en la plaza delante de la casa de Dios, temblando a causa de este asunto y de la intensa lluvia. 10Entonces se levantó el sacerdote Esdras y les dijo: “Ustedes han sido infieles y se han casado con mujeres extranjeras añadiendo así a la culpa de Israel. 11Ahora pues, confiesen al SEÑOR, Dios de sus padres, y hagan Su voluntad; sepárense de los pueblos de esta tierra y de las mujeres extranjeras.”
12Toda la asamblea respondió, y dijo a gran voz: “¡Está bien! Tal como has dicho es nuestro deber cumplirlo. 13Sólo que el pueblo es numeroso, y es la temporada de lluvia, y no podemos permanecer afuera. Tampoco se puede hacer todo en un solo día ni en dos, porque hemos pecado en gran manera en este asunto. 14Que nuestros jefes representen toda la asamblea y que todos aquellos en nuestras ciudades que se han casado con mujeres extranjeras vengan en tiempos señalados, junto con los ancianos y jueces de cada ciudad, hasta que la tremenda ira de nuestro Dios a causa de este asunto se aparte de nosotros.” 15Solamente Jonatán, hijo de Asael, y Jahazías, hijo de Ticva, se opusieron a esto, con Mesulam y el Levita Sabetai respaldándolos.
16Pero los desterrados sí lo hicieron. Y el sacerdote Esdras designó a hombres jefes de casas paternas por cada una de sus casas paternas, todos ellos por nombre. Y se reunieron el primer día del mes décimo para investigar el asunto. 17Terminaron de investigar a todos los hombres que se habían casado con mujeres extranjeras el primer día del mes primero.
18Entre los hijos de los sacerdotes que se habían casado con mujeres extranjeras se encontraron, de los hijos de Jesúa, hijo de Josadac, y de sus hermanos: Maasías, Eliezer, Jarib y Gedalías. 19(Ellos juraron despedir a sus mujeres, y siendo culpables, ofrecieron un carnero del rebaño por su delito). 20De los hijos de Imer: Hananí y Zebadías; 21de los hijos de Harim: Maasías, Elías, Semaías, Jehiel y Uzías; 22de los hijos de Pasur: Elioenai, Maasías, Ismael, Natanael, Jozabad y Elasa.
25También entre los de Israel: de los hijos de Paros: Ramía, Jezías, Malquías, Mijamín, Eleazar, Malquías y Benaía; 26de los hijos de Elam: Matanías, Zacarías, Jehiel, Abdi, Jeremot y Elías; 27de los hijos de Zatu: Elioenai, Eliasib, Matanías, Jeremot, Zabad y Aziza; 28de los hijos de Bebai: Johanán, Hananías, Zabai y Atlai; 29de los hijos de Bani: Mesulam, Maluc, Adaía, Jasub, Seal y Ramot; 30de los hijos de Pahat Moab: Adna, Quelal, Benaía, Maasías, Matanías, Bezalel, Binúi y Manasés; 31de los hijos de Harim: Eliezer, Isías, Malquías, Semaías, Simeón, 32Benjamín, Maluc y Semarías; 33de los hijos de Hasum: Matenai, Matata, Zabad, Elifelet, Jeremai, Manasés y Simei; 34de los hijos de Bani: Madai, Amram, Uel, 35Benaía, Bedías, Quelúhi, 36Vanías, Meremot, Eliasib, 37Matanías, Matenai, Jaasai, 38Bani, Binúi, Simei, 39Selemías, Natán, Adaía, 40Macnadebai, Sasai, Sarai, 41Azareel, Selemías, Semarías, 42Salum, Amarías y José; 43de los hijos de Nebo: Jeiel, Matatías, Zabad, Zebina, Jadau, Joel y Benaía. 44Todos éstos se habían casado con mujeres extranjeras, y algunos de ellos tenían mujeres que les habían dado hijos.
Nueva Versión Internacional
1Mientras Esdras oraba y hacía esta confesión llorando y postrándose delante del templo de Dios, a su alrededor se reunió una gran asamblea de hombres, mujeres y niños del pueblo de Israel. Toda la multitud lloraba amargamente. 2Entonces uno de los descendientes de Elam, que se llamaba Secanías hijo de Jehiel, se dirigió a Esdras y le dijo: «Nosotros hemos sido infieles a nuestro Dios, pues tomamos por esposas a mujeres de los pueblos vecinos; pero todavía hay esperanza para Israel. 3Hagamos un pacto con nuestro Dios, comprometiéndonos a expulsar a todas estas mujeres y a sus hijos, conforme al consejo que nos has dado tú, y todos los que aman el mandamiento de Dios. ¡Que todo se haga de acuerdo con la ley! 4Levántate, pues esta es tu responsabilidad; nosotros te apoyamos. ¡Cobra ánimo y pon manos a la obra!»
5Al oír esto, Esdras se levantó e hizo que los jefes de los sacerdotes, los levitas y todo el pueblo de Israel se comprometieran, bajo juramento, a cumplir con lo que habían dicho; y ellos lo juraron. 6Luego Esdras salió del templo de Dios y fue a la habitación de Johanán hijo de Eliasib. Allí se quedó sin comer pan ni beber agua, porque estaba muy deprimido por causa de la infidelidad de los repatriados.
7Posteriormente anunciaron en Judá y Jerusalén que todos los que habían regresado del cautiverio debían reunirse en Jerusalén. 8Y advirtieron que a todo el que no se presentara en el plazo de tres días, según la decisión de los jefes y dirigentes, se le quitarían sus propiedades y se le expulsaría de la asamblea de los repatriados.
10Entonces el sacerdote Esdras se puso en pie y les dijo: ?Ustedes han sido infieles y han aumentado la culpa de Israel, pues han contraído matrimonio con mujeres extranjeras. 11Ahora, pues, confiesen su pecado al SEÑOR, Dios de nuestros antepasados, y hagan lo que a él le agrada. Sepárense de los paganos y de las mujeres extranjeras.
12Toda la asamblea contestó en alta voz: ?Haremos todo lo que nos has dicho. 13Pero no podemos quedarnos a la intemperie; estamos en época de lluvias y esto no es asunto de uno o dos días, pues somos muchos los que hemos cometido este pecado. 14Proponemos que se queden solo los jefes del pueblo, y que todos los que viven en nuestras ciudades y se han casado con mujeres extranjeras se presenten en fechas determinadas, junto con los dirigentes y jueces de cada ciudad, hasta que se aparte de nosotros la terrible ira de nuestro Dios por causa de esta infidelidad.
15Solo se opusieron Jonatán hijo de Asael y Jahazías hijo de Ticvá, apoyados por los levitas Mesulán y Sabetay. 16Los que habían regresado del cautiverio actuaron según lo que se había convenido. Entonces el sacerdote Esdras seleccionó y llamó por nombre a ciertos jefes de familia, y a partir del primer día del mes décimo se reunió con ellos para tratar cada caso.
18Los descendientes de los sacerdotes que se habían casado con mujeres extranjeras fueron los siguientes: De Jesúa hijo de Josadac, y de sus hermanos: Maseías, Eliezer, Jarib y Guedalías, 19los cuales se comprometieron a despedir a sus mujeres extranjeras, y ofrecieron un carnero como ofrenda de expiación por su pecado.
34De Baní: Maday, Amirán, Uel, 35Benaías, Bedías, Queluhi, 36Vanías, Meremot, Eliasib, 37Matanías, Matenay, Jasay.
Reina-Valera 1960
1Mientras oraba Esdras y hacía confesión, llorando y postrándose delante de la casa de Dios, se juntó a él una muy grande multitud de Israel, hombres, mujeres y niños; y lloraba el pueblo amargamente. 2Entonces respondió Secanías hijo de Jehiel, de los hijos de Elam, y dijo a Esdras: Nosotros hemos pecado contra nuestro Dios, pues tomamos mujeres extranjeras de los pueblos de la tierra; mas a pesar de esto, aún hay esperanza para Israel. 3Ahora, pues, hagamos pacto con nuestro Dios, que despediremos a todas las mujeres y los nacidos de ellas, según el consejo de mi señor y de los que temen el mandamiento de nuestro Dios; y hágase conforme a la ley. 4Levántate, porque ésta es tu obligación, y nosotros estaremos contigo; esfuérzate, y pon mano a la obra. 5Entonces se levantó Esdras y juramentó a los príncipes de los sacerdotes y de los levitas, y a todo Israel, que harían conforme a esto; y ellos juraron.
6Se levantó luego Esdras de delante de la casa de Dios, y se fue a la cámara de Johanán hijo de Eliasib; e ido allá, no comió pan ni bebió agua, porque se entristeció a causa del pecado de los del cautiverio. 7E hicieron pregonar en Judá y en Jerusalén que todos los hijos del cautiverio se reuniesen en Jerusalén; 8y que el que no viniera dentro de tres días, conforme al acuerdo de los príncipes y de los ancianos, perdiese toda su hacienda, y el tal fuese excluido de la congregación de los del cautiverio.
9Así todos los hombres de Judá y de Benjamín se reunieron en Jerusalén dentro de los tres días, a los veinte días del mes, que era el mes noveno; y se sentó todo el pueblo en la plaza de la casa de Dios, temblando con motivo de aquel asunto, y a causa de la lluvia. 10Y se levantó el sacerdote Esdras y les dijo: Vosotros habéis pecado, por cuanto tomasteis mujeres extranjeras, añadiendo así sobre el pecado de Israel. 11Ahora, pues, dad gloria a Jehová Dios de vuestros padres, y haced su voluntad, y apartaos de los pueblos de las tierras, y de las mujeres extranjeras. 12Y respondió toda la asamblea, y dijeron en alta voz: Así se haga conforme a tu palabra. 13Pero el pueblo es mucho, y el tiempo lluvioso, y no podemos estar en la calle; ni la obra es de un día ni de dos, porque somos muchos los que hemos pecado en esto. 14Sean nuestros príncipes los que se queden en lugar de toda la congregación, y todos aquellos que en nuestras ciudades hayan tomado mujeres extranjeras, vengan en tiempos determinados, y con ellos los ancianos de cada ciudad, y los jueces de ellas, hasta que apartemos de nosotros el ardor de la ira de nuestro Dios sobre esto. 15Solamente Jonatán hijo de Asael y Jahazías hijo de Ticva se opusieron a esto, y los levitas Mesulam y Sabetai les ayudaron.
16Así hicieron los hijos del cautiverio. Y fueron apartados el sacerdote Esdras, y ciertos varones jefes de casas paternas según sus casas paternas; todos ellos por sus nombres se sentaron el primer día del mes décimo para inquirir sobre el asunto. 17Y terminaron el juicio de todos aquellos que habían tomado mujeres extranjeras, el primer día del mes primero.
18De los hijos de los sacerdotes que habían tomado mujeres extranjeras, fueron hallados éstos: De los hijos de Jesúa hijo de Josadac, y de sus hermanos: Maasías, Eliezer, Jarib y Gedalías. 19Y dieron su mano en promesa de que despedirían sus mujeres, y ofrecieron como ofrenda por su pecado un carnero de los rebaños por su delito. 20De los hijos de Imer: Hanani y Zebadías. 21De los hijos de Harim: Maasías, Elías, Semaías, Jehiel y Uzías. 22De los hijos de Pasur: Elioenai, Maasías, Ismael, Natanael, Jozabad y Elasa.
23De los hijos de los levitas: Jozabad, Simei, Kelaía (éste es Kelita), Petaías, Judá y Eliezer. 24De los cantores: Eliasib; y de los porteros: Salum, Telem y Uri.
25Asimismo de Israel: De los hijos de Paros: Ramía, Jezías, Malquías, Mijamín, Eleazar, Malquías y Benaía. 26De los hijos de Elam: Matanías, Zacarías, Jehiel, Abdi, Jeremot y Elías. 27De los hijos de Zatu: Elioenai, Eliasib, Matanías, Jeremot, Zabad y Aziza. 28De los hijos de Bebai: Johanán, Hananías, Zabai y Atlai. 29De los hijos de Bani: Mesulam, Maluc, Adaía, Jasub, Seal y Ramot. 30De los hijos de Pahat-moab: Adna, Quelal, Benaía, Maasías, Matanías, Bezaleel, Binúi y Manasés. 31De los hijos de Harim: Eliezer, Isías, Malquías, Semaías, Simeón, 32Benjamín, Maluc y Semarías. 33De los hijos de Hasum: Matenai, Matata, Zabad, Elifelet, Jeremai, Manasés y Simei. 34De los hijos de Bani: Madai, Amram, Uel, 35Benaía, Bedías, Quelúhi, 36Vanías, Meremot, Eliasib, 37Matanías, Matenai, Jaasai, 38Bani, Binúi, Simei, 39Selemías, Natán, Adaía, 40Macnadebai, Sasai, Sarai, 41Azareel, Selemías, Semarías, 42Salum, Amarías y José. 43Y de los hijos de Nebo: Jeiel, Matatías, Zabad, Zebina, Jadau, Joel y Benaía. 44Todos estos habían tomado mujeres extranjeras; y había mujeres de ellos que habían dado a luz hijos.
Biblia del Jubileo
1Y orando Esdras y confesando, llorando y postrándose delante de la casa de Dios, se juntó a él una muy grande multitud de Israel, hombres y mujeres y niños; y lloraba el pueblo con gran llanto. 2Entonces respondió Secanías hijo de Jehiel, de los hijos Elam, y dijo a Esdras: Nos hemos rebelado contra nuestro Dios, pues tomamos mujeres extranjeras de los pueblos de la tierra; mas hay aún esperanza para Israel sobre esto. 3Por tanto ahora hagamos alianza con nuestro Dios, que echaremos todas las mujeres y los nacidos de ellas, según el consejo del Señor, y de los que temen el mandamiento de nuestro Dios; y hágase conforme a la ley. 4Levántate, porque a ti toca el negocio, y nosotros estaremos contigo; esfuérzate, y ponlo por obra. 5Entonces se levantó Esdras, y juramentó a los príncipes de los sacerdotes y de los levitas, y a todo Israel, que harían conforme a esto; y ellos juraron. 6Se levantó luego Esdras de delante de la Casa de Dios, y se fue a la cámara de Johanán hijo de Eliasib; e ido allá, no comió pan ni bebió agua, porque se entristeció sobre la prevaricación de los de la transmigración. 7E hicieron pasar pregón por Judá y por Jerusalén a todos los hijos de la transmigración, que se juntasen en Jerusalén; 8y que el que no viniera dentro de tres días, conforme al acuerdo de los príncipes y de los ancianos, perdiese toda su hacienda, y él fuese apartado de la compañía de los de la transmigración. 9Así fueron reunidos todos los varones de Judá y de Benjamín en Jerusalén dentro de tres días, a los veinte del mes, el cual era el mes noveno; y se sentó todo el pueblo en la plaza de la Casa de Dios, temblando con motivo de aquel negocio, y a causa de las lluvias. 10Y se levantó Esdras el sacerdote, y les dijo: Vosotros habéis prevaricado, por cuanto tomásteis mujeres extrañas, añadiendo así sobre el pecado de Israel. 11Ahora pues, dad confesión al SEÑOR Dios de vuestros padres, y haced su voluntad, y apartaos de los pueblos de las tierras, y de las mujeres extranjeras. 12Y respondió toda la congregación, y dijeron en alta voz: Así se haga conforme a tu palabra. 13Mas el pueblo es mucho, y el tiempo lluvioso, y no hay fuerza para estar en la calle; ni la obra es de un día ni de dos, porque somos muchos los que hemos prevaricado en este negocio. 14Estén ahora nuestro príncipes, los de toda la congregación; y todos aquellos que en nuestras ciudades hubieren tomado mujeres extranjeras, vengan a tiempos aplazados, y con ellos los ancianos de cada ciudad, y los jueces de ellas, hasta que apartemos de nosotros el furor de la ira de nuestro Dios sobre esto. 15Fueron pues puestos sobre este negocio Jonatán hijo de Asael, y Jahazías hijo de Ticva; y Mesulam y Sabetai, levitas, les ayudaron. 16E hicieron así los hijos de la transmigración. Y fueron apartados Esdras y los varones cabezas de los padres en la casa de sus padres, y todos ellos por sus nombres; y se sentaron el primer día del mes décimo para inquirir sobre el negocio. 17Y concluyeron, con todos aquellos que habían tomado mujeres extranjeras, al primer día del mes primero. 18Y de los hijos de los sacerdotes que habían tomado mujeres extranjeras, fueron hallados éstos: De los hijos de Jesúa hijo de Josadac, y de sus hermanos: Maasías, y Eliezer, y Jarib, y Gedalías; 19y dieron su mano en promesa de echar sus mujeres, y ofrecieron como culpados un carnero de los rebaños por su delito. 20Y de los hijos de Imer: Hanani y Zebadías. 21Y de los hijos de Harim: Maasías, y Elías, y Semaías, y Jehiel, y Uzías. 22Y de los hijos de Pasur: Elioenai, Maasías, Ismael, Natanael, Jozabad, y Elasa. 23Y de los hijos de los levitas: Jozabad, y Simei, Kelaía (éste es Kelita), Petaías, Judá y Eliezer. 24Y de los cantores, Eliasib; y de los porteros: Salum, y Telem, y Uri. 25Asimismo de Israel, de los hijos de Paros: Ramía y Jezías, y Malquías, y Mijamín, y Eleazar, y Malquías, y Benaía. 26Y de los hijos de Elam: Matanías, Zacarías, y Jehiel, y Abdi, y Jeremot, y Elías. 27Y de los hijos de Zatu: Elioenai, Eliasib, Matanías, y Jeremot, y Zabad, y Aziza. 28Y de los hijos de Bebai: Johanán, Hananías, Zabai, Atlai. 29Y de los hijos de Bani: Mesulam, Maluc, y Adaía, Jasub, y Seal, y Ramot. 30Y de los hijos de Pahat-moab: Adna, y Quelal, Benaía, Maasías, Matanías, Bezaleel, Binúi y Manasés. 31Y de los hijos de Harim: Eliezer, Isías, Malquías, Semaías, Simeón, 32Benjamín, Maluc, y Semarías. 33De los hijos de Hasum: Matenai, Matata, Zabad, Elifelet, Jeremai, Manasés, y Simei. 34De los hijos de Bani: Madai, Amram y Uel, 35Benaía, Bedías, Quelúhi, 36Vanías, Meremot, Eliasib, 37Matanías, Matenai, y Jaasai, 38y Bani, y Binúi, Simei, 39y Selemías y Natán y Adaía, 40Macnadebai, Sasai, Sarai, 41Azareel, y Selemías, Semarías, 42Salum, Amarías, y José. 43Y de los hijos de Nebo: Jeiel, Matatías, Zabad, Zebina, Jadau, Joel y Benaía. 44Todos éstos habían tomado mujeres extranjeras; y había mujeres de ellos que habían dado a luz hijos.