¿Qué significa Génesis 20:18?

El versículo anterior nos dijo que después de que Abrahán orara por Abimelec y su gente, Dios permitió que tanto la esposa de Abimelec como sus esclavas pudieran tener hijos de nuevo. Este versículo acaba diciendo que Dios había cerrado todos los vientres de todas las mujeres en la casa de Abimelec a causa de Sara. Abimelec se la había llevado para convertirla en su esposa ya que Abrahán le había dicho que Sara era solo su hermana (Génesis 20:2–3).

Todo esto establece ideas importantes a la hora de interpretar este incidente. Primero, Sara debió haber estado en la casa de Abimelec por un tiempo antes de que Dios se le apareciera en un sueño. Sara tuvo que estar allí el tiempo suficiente para que se hiciera evidente que las mujeres de la casa no podían tener hijos, ya que uno necesita algo de tiempo para darse cuenta de que algo así pudiera estar ocurriendo.

En segundo lugar, esto nos muestra una vez más que Dios está en control de la fertilidad de las personas, y Él es quien decide cuándo una familia debe ser bendecida con un hijo o una hija. El Salmo 127:3 indica que los niños son un regalo del Señor. A veces Dios no permite que nazcan, tal y como lo hizo aquí, o a veces no permiten que nazcan hasta que llegue el momento adecuado, tal y como sucederá con el nacimiento de Isaac durante el siguiente capítulo. En otras ocasiones, Dios provoca que no nazcan niños, y no tenemos una explicación clara del por qué decide tomar esa decisión (y eso tampoco significa que Dios pudiera estar condenando a alguien). En cualquier caso, las personas necesitan seguir confiando en Dios, en Su gracia, en Su amor, y en los momentos en los que Él piensa que deben ocurrir las cosas.