¿Qué significa Génesis 22:17?
Abrahán acaba de pasar una prueba increíblemente difícil que trataba de demostrar el nivel de confianza que había depositado en Dios: se le pidió que sacrificara a su amado hijo, Isaac (Génesis 22:1-2). La disposición de Abrahán a obedecer a Dios sin dudarlo en ningún momento se basaba en las experiencias que había tenido con Dios en el pasado, ya que Dios siempre acabó demostrando ser justo y recto en cada una de las situaciones en las que había intervenido. Incluso cuando nuestra perspectiva humana está limitada y no sabemos lo que está pasando, Dios sabe lo que está haciendo en todo momento. Al final, Dios interviene y les ofreció un carnero para ofrecérselo como sacrificio (Génesis 22:11-13), justificando así la fe de Abrahán una vez más.En el versículo anterior, el Señor declaró que había jurado "por sí mismo" hacer por Abrahán lo que se menciona en este versículo y en el siguiente. En esencia, Dios está confirmando y enfatizando que hará por Abrahán lo que le había prometido hacer varias veces antes. Aquí, sin embargo, las promesas se cumplen con mayor fuerza y especificidad. El Señor dice: "ciertamente te bendeciré". Dios ha estado bendiciendo a Abrahán todo este tiempo, pero esta vez la promesa se enfatiza con la palabra "ciertamente". Por lo tanto, ya no hay duda acerca de que Dios iba a bendecir a Abrahán.
El Señor también promete multiplicar la descendencia de Abrahán hasta que hubiera tantas personas como estrellas del cielo, algo que le había prometido antes en un momento en el que Abrahán estaba mirando el cielo nocturno en Génesis 15:5. Sin embargo, por primera vez, el Señor añade que la descendencia de Abrahán será tan numerosa como los granos de arena que hay en las orillas del mar. ¡Esa es una cantidad enorme de descendientes!
Además, el Señor jura que los descendientes de Abrahán vencerán a sus enemigos. Aquí se está comunicando de una manera más específica información sobre el día en que Israel conquistaría a sus enemigos mientras que al mismo tiempo tomaría posesión de la tierra prometida de Canaán.
El siguiente versículo incluye otra promesa que el Señor le jura "por sí mismo" a Abrahán.