¿Qué significa Génesis 27:14?

Jacob tomó la decisión consciente de seguir el plan de su madre (Génesis 27:6–10). Su plan era engañar a su padre, Isaac, para que le bendijera en lugar de a su hermano mayor, Esaú. Esto era similar al truco manipulador que Jacob había puesto en práctica para hacerle jurar a Esaú que le diera su primogenitura (Génesis 25:29–34). Jacob no protestó acerca de si este era o no el curso de acción correcto, sino que la única pregunta que le hizo a su madre trataba acerca de las consecuencias que sus acciones podrían traerle (Génesis 27:12). Ante su insistencia, Jacob hizo lo que su madre quería que hiciese y le llevó los cabritos a su madre. Después, Rebeca le preparó una comida deliciosa a su marido, una que ella sabía que le encantará. El plan estaba en marcha.

Génesis nunca condena ni alaba directamente a Jacob por esta decisión. ¿Significa esto que tenía razón al participar en este plan? Definitivamente no, pero las Escrituras simplemente registran lo que sucedió, ni más ni menos. Dios ha usado los errores de los seres humanos imperfectos para cumplir Su voluntad en el mundo desde el principio; y, de hecho, todavía lo hace. Más adelante en el libro de Génesis, podremos leer sobre las consecuencias que todo esto acabó trayendo. Rebeca nunca volvería a ver a Jacob (Génesis 27:43–44), y Jacob se vería atrapado dentro de una estafa en un futuro muy cercano (Génesis 29).