¿Qué significa Génesis 29:16?
Después de que Jacob había vivido con él durante un mes (Génesis 29:14), Labán se acercó a Jacob para preguntarle qué salario quería su sobrino para quedarse allí y seguir trabajando para él. Aparentemente, estaba impresionado con el trabajo que Jacob estaba haciendo o simplemente le gustaba tenerlo cerca.Antes de contarnos la respuesta de Jacob, la historia retrocede para añadir algunos personajes a la trama. Labán tenía dos hijas. Lea era la mayor de las dos. La historia ya nos ha presentado a Raquel, la hermana menor, quien era pastora (Génesis 29:6–9). Dado que Isaac había enviado a Jacob para casarse con una de las hijas de Labán (Génesis 28:1–2), Jacob quizás había estado considerando a estas dos desde que llegó a la casa de Labán.
Se nos dice muy poco sobre estas mujeres, aparte de compartir una breve idea de su apariencia física. Desafortunadamente para Lea, ella no era tan atractiva como su hermana menor, y Jacob no la amará tanto como a Raquel (Génesis 29:17–18).
Génesis 29:1–30 describe la llegada de Jacob a la casa de su tío. Labán estaba feliz de ver a su sobrino, probablemente por primera vez. Jacob se enamoró de la hija más atractiva de Labán, Raquel, y aceptó trabajar para Labán siete años para así poder casarse con ella. En la noche de bodas, sin embargo, Labán cambió traicioneramente a Raquel por su hermana mayor, Lea. Jacob aceptó casarse con Raquel durante la siguiente semana, pero tuvo que prometer que trabajaría para Labán por otros siete años para que esto ocurriera.
El viaje de Jacob desde su casa lo lleva hacia la casa de su tío en Jarán. Jacob se enamora de la hija menor de Labán, Raquel, y acepta trabajar para Labán durante siete años para casarse con ella. Cuando llega el momento, Labán cambió a Raquel por su hermana mayor y menos atractiva, Lea. Jacob se sorprende al descubrir que había consumado el matrimonio con la hermana equivocada. El manipulador Labán le asegura a Jacob que aún podía casarse con Raquel durante la siguiente semana, siempre que trabajara por él por otros siete años. Jacob amaba a Raquel más que a Lea, pero con la ayuda del Señor, Lea le permitió a Jacob tener sus primeros cuatro hijos.