¿Qué significa Génesis 4:10?
Después de que Caín negó saber dónde estaba Abel, Dios le dice que ya lo sabía. Usando un lenguaje poético, Dios dice que puede escuchar la voz de la sangre de Abel clamándole desde la tierra para que se hiciera justicia. En realidad, no sabemos cómo intentó Caín encubrir su crimen; quizás enterró a Abel o simplemente lo dejó tirado en alguna parte. En cualquier caso, más allá de la propia omnisciencia de Dios, habrían quedado algunos rastros físicos para conectar el asesinato de Abel con Caín. Caín se negó a la hora de aceptar que él fue el asesino, pero nadie lo llegaría a creer, ni Dios, ni otras personas.Este primer asesinato comienza a revelar los principios de justicia y misericordia de Dios. La sangre derramada en una muerte injusta clama por venganza para que se corrija el mal que se acaba de hacer. Dios asumirá la responsabilidad de ejecutar esa justicia, así como de abrir un camino para que se le muestre cierta misericordia al pecador. Al igual que con Adán y Eva, Dios elige la misericordia y el exilio en lugar de la destrucción.
Génesis 4:1–16 narra el comienzo de la historia humana a raíz del pecado de Adán y Eva y la separación de Dios. Este pasaje detalla el asesinato de Abel por su hermano mayor Caín, el primer hijo de Adán y Eva. Caín y Abel trabajan la tierra y cuidan ovejas. Los dos adoran a Dios, pero Caín mata a Abel en un ataque de envidia por el rechazo que Caín ha recibido por parte de Dios debido a su ofrenda. El primer ser humano nacido en la tierra se convierte en el primer asesino. Dios obliga a Caín a dejar a su familia y vagar por la tierra, pero Dios también marca a Caín con la promesa de que quienquiera que lo matara, recibiría un castigo más severo aún y la venganza de Dios.
Las consecuencias del pecado se hacen evidentes en el capítulo 4: envidia, arrogancia, rebelión, asesinato, castigo, separación de la familia y separación de Dios. El primogénito de Adán y Eva, Caín, asesina celosamente a su hermano Abel y lo pierde todo. Adán y Eva los pierden a ambos. Los descendientes de Caín incrementan su pecaminosidad. Sin embargo, Dios ayuda a Eva en el parto e incluso protege a Caín mientras deambula por la Tierra. Eva sigue siendo una mujer de fe, incluso después de haber sufrido tanto; y los hijos de Set, nacidos después del asesinato de Abel, se convierten en un pueblo que proclamaría el nombre del Señor.