¿Qué significa Génesis capitulo 40?
José continuaba estando en una prisión especial cerca de la casa del capitán de la guardia (Génesis 39:11–20). Si bien el antiguo amo de José ocupaba ese cargo (Génesis 39:1), las Escrituras no usan el nombre de Potifar desde este momento en adelante. Por lo tanto, no está claro si Potifar todavía estaba desempeñando ese rol o si había sido reemplazado. Después de que José hubiera estado allí "algún tiempo", probablemente varios años, llegaron dos nuevos prisioneros. El faraón se había enfadado tanto con su jefe de los coperos como con su jefe de los panaderos, y los arrojó a la prisión, también llamada "el hoyo" o "el calabozo", donde estaba José. Génesis no nos dice cuáles fueron las ofensas que supuestamente habían cometido (Génesis 40:1–3).La diligencia y el carácter de José lo llevaron a convertirse en alguien importante dentro de la cárcel (Génesis 39:21–23). José recibió la tarea de cuidar de estos dos nuevos hombres. Ellos, también, estuvieron en la cárcel durante "algún tiempo", probablemente esto se refiere a una serie de años en concreto. En un sistema legal dirigido por un dictador, los presos están sujetos a sus caprichos. Una noche, ambos hombres tuvieron varios sueños que los dejaron impactados. La religión egipcia se tomaba los sueños muy en serio, pero estos sueños fueron especialmente impactantes. Los hombres se quedaron tan perturbados por sus sueños que José se dio cuenta de que algo no andaba bien (Génesis 40:4–7).
En respuesta a su preocupación, José les aseguró que Dios podía interpretarles los sueños y que José les transmitiría su significado. El sueño del primer hombre involucraba tres vides muy productivas; José le explicó que el copero volvería a tener su trabajo anterior en solo tres días. Además, José le pidió al hombre que hablara con el faraón acerca de él. Aunque José aceptó la voluntad que Dios tenía para su vida, también reconoció la oportunidad que tuvo en ese momento para abogar por su liberación (Génesis 40:8–15).
El sueño del segundo hombre también implicaba que algo iba a pasar en tres días, pero no era algo bueno del todo. La expresión "levantar la cabeza" se refiere a una persona que está mirando hacia abajo, derrotado y lleno de vergüenza; en un momento, esta persona decide levantar la cabeza para volver a sentirse seguro y confiado (Salmo 3:3). El faraón les "levantará la cabeza" a los dos, pero quizás la expresión se le aplicó al panadero de una manera un poco más literal, ya que el panadero iba a ser ejecutado de inmediato y su cadáver se dejaría a la intemperie para que se pudriera (Génesis 40: 16–19).
Estas predicciones se cumplieron exactamente tal y como las había predicho José. Tres días después, el rey sacó a los dos hombres de la cárcel como parte de la celebración de su cumpleaños. Uno consiguió su antiguo puesto de trabajo, el otro fue asesinado y su cuerpo alimentó a los animales carroñeros. A pesar de esto, el copero no mencionó a José. Ya fuera por miedo, por precaución, o por algún otro motivo, no le dijo nada al faraón. Sin embargo, no se olvidó de José del todo, sino que se olvidó de lo que José le había pedido que hiciera por él (Génesis 40:20–23).
Pasarán otros dos años antes de que una situación en particular le hiciera recordar al copero que José estaba en la cárcel y que José tenía una habilidad increíble a la hora de interpretar sueños. (Génesis 41:1, 9–14).