¿Qué significa Génesis 41:35?
Los reyes antiguos gobernaban como si fueran dioses, y a veces reclamaban un estatus divino literal. Incluso sus asesores designados debían tener cuidado de no sobrepasar sus límites. Sin embargo, en este pasaje, José, un esclavo hebreo que había estado en la cárcel (Génesis 41:9–16) le está instruyendo al faraón de Egipto sobre cómo gobernar su propia nación (Génesis 41:33–34). El consejo de José vino después de que interpretara los sueños proféticos que el faraón había tenido (Génesis 41:25–32). En lugar de simplemente detenerse allí, José continuó ofreciendo sugerencias sobre cómo reaccionar ante esas visiones.El consejo de José era usar los siete años de abundancia para almacenar alimentos, y todo esto debía ocurrir bajo el liderazgo de un hombre sabio. Al hacer esto, se podría sobrevivir a los siete años de hambruna que vendrían después (Génesis 41:36). Esto implicaba el hecho de imponer una especie de impuesto, el 20 por ciento de cada cosecha que se produjera durante los siguientes siete años. Ese trigo debía ser designado especialmente bajo la autoridad del faraón, y debía comenzar a usarse solo cuando llegara hambruna.
Génesis 41:9–36 contiene la explicación de José sobre las visiones que tuvo el faraón. El gobernante de Egipto se sentía agitado por lo sueños que había tenido y, su copero, quien anteriormente estaba en la cárcel, recordó a un joven hebreo que estaba con él en la cárcel. Este era José, quien le había explicado su sueño al copero mientras estaban en la cárcel (Génesis 40:23). José explica que los sueños de Faraón significan que habría siete años de abundancia y siete años de hambruna. José, entonces, propone audazmente un plan para manejar la crisis que se estaba avecinando.
En Génesis 41, José comienza siendo un esclavo hebreo olvidado en prisión y termina siendo el segundo hombre más poderoso de Egipto. El copero del capítulo anterior finalmente menciona a José dos años más tarde, cuando el faraón estaba preocupado por unos sueños que tuvo que los "sabios" de Egipto no pudieron interpretarle. José le reveló el significado de los sueños al faraón: siete años de abundancia serían seguidos por siete años de una gran hambruna. El faraón, reconociendo que el Espíritu de Dios estaba con José, lo convirtió en el segundo al mando de toda la nación y le encargó el trabajo de preparar al país para afrontar la hambruna.