¿Qué significa Génesis 42:38?
A pesar de la dramática oferta de Rubén (Génesis 42:37), Jacob se negó a poner en peligro la vida de Benjamín. La manera en la que Jacob respondió a las noticias de sus hijos (Génesis 42:29–35) fue muy amarga (Génesis 42:36). Jacob incluso se descontroló un poco. En esencia, Jacob decidió que era mejor perder a Simeón que arriesgarse a perder a su hijo menor. Benjamín era el último hijo que tuvo a través de su amada esposa Raquel (Génesis 35:16–19). Jacob creía que José había muerto (Génesis 37:32–33).Jacob mostraba un favoritismo tan escandaloso hacia José que sus hermanos mayores comenzaron a tenerle celos (Génesis 37:3–4), lo que provocó que sus hermanos lo vendieran como esclavo y le mintieran sobre ello a Jacob (Génesis 37:28–31). Ahora, mientras uno de sus otros hijos estaba detenido en Egipto, Jacob dice que Benjamín es el único que le quedaba. Este debe haber sido un comentario aplastante. En el mejor de los casos, Jacob quería decir que Benjamín era el último de los hijos de Raquel que le quedaba. Sin embargo, la historia previa hizo que fuera casi seguro que él quisiera decir mucho más que eso: lleno de dolor e ira, Jacob declaró abiertamente que él prefería a José y a Benjamín por encima de sus otros hijos.
Por su parte, es probable que los hermanos sintieran más culpa que autocompasión, ya que sabían que eran responsables de lo que estaba sucediendo (Génesis 42:21–22). De hecho, expresaron que Dios estaba detrás de todo esto, castigándolos por todo lo que habían hecho. En ese sentido, ellos también fueron responsables de la pérdida de Simeón.
Jacob concluye con una declaración de gran desesperación, ya que llegó a sentir un dolor descomunal por la pérdida de José (Génesis 37:34–35). Jacob está convencido de que la pérdida de Benjamín finalmente lo mataría. Finalmente, debido a la hambruna, Jacob se verá obligado a cambiar sus planes (Génesis 43:1–2).