¿Qué significa Génesis 43:30?
Después de hablar afectuosa y cortésmente con su hermano menor Benjamín (Génesis 43:29), José se emocionó mucho. Siendo el segundo hombre más poderoso de la nación de Egipto (Génesis 41:44), no podía perder el control en un entorno público. En cambio, se fue a su propia habitación y lloró solo para controlar sus emociones una vez más.La intensa reacción de José fue impulsada por las circunstancias únicas de este reencuentro. En realidad, no había visto a Benjamín en unos veinte años. Cuando José tenía diecisiete años (Génesis 37:2), fue vendido como esclavo por los celos que sus hermanos mayores le tenían (Génesis 37:24–28). Sin embargo, Benjamín no participó en este evento. Durante los siguientes veinte años, José se convirtió tanto en el gobernador de Egipto como en la principal razón por la que la nación pudo sobrevivir a una intensa hambruna (Génesis 41:46;53–54). José les ocultó su identidad a sus hermanos cuando fueron a comprar trigo (Génesis 42:7–8), pero hizo lo posible para que le trajeran a su hermano Benjamín (Génesis 42:19–20). Esta es la primera vez en décadas que José había visto a su hermano Benjamín.
Los hermanos de José aún no tenían ni idea de que este poderoso gobernante egipcio era la misma persona que vendieron como esclavo cuando era un adolescente. José continuaba ocultándoles este hecho, ya que quería ponerlos a prueba más veces (Génesis 43:34; 44:1–2). Claramente, José estaba profundamente afectado por haberse reunido con ellos. Con el tiempo, nos quedará claro que las intenciones de José habían sido buenas desde el principio (Génesis 47: 11–12). Por ahora, no había indicios de cuándo o de si José les revelaría su identidad.