¿Qué significa Génesis 44:27?
Judá acaba de explicarle a un gobernante egipcio que él y sus hermanos le dijeron a su anciano padre que no podían regresar a comprar más trigo a menos que se llevaran a Benjamín con ellos. Esta había sido la demanda del gobernante (Génesis 42:19–20), y estaba fuera de su control. Esto forma parte de la súplica desesperada que Judá le estaba haciendo al gobernante para recibir algo de misericordia (Génesis 44:18–26). En realidad, no se dio cuenta de que estaba hablando con su propio hermano José (Génesis 42:7–8), a quien él mismo y sus hermanos vendieron como esclavo veinte años antes (Génesis 37:24–28).Ahora Judá le está diciendo lo que su padre había respondido. Esto nos revela las dolorosas profundidades del favoritismo que Jacob sentía por Raquel y por sus dos hijos. Jacob dijo: "mi esposa me dio dos hijos". Al menos en ese momento, Jacob no pensó ni en Lea, ni en sus otras dos esposas sirvientes, ni en sus otros diez hijos de la misma manera que lo hacía sobre Raquel y los hijos que tuvo con ella.
Una vez más, el lector recibe más razones para comprender el por qué los otros hijos de Jacob llegaron a resentirse con José (Génesis 37:3–4). ¿Cómo podrían no hacerlo? Judá, sin embargo, no reveló ninguna de sus emociones ante lo que Jacob había dicho. De hecho, todo su discurso tenía el simple e importante objetivo de salvar a Benjamín. Por lo tanto, claramente, José pudo ver que sus hermanos habían madurado.