¿Qué significa Génesis 44:32?
El líder egipcio a quien Judá le estaba hablando era en realidad José: el otro hijo de Raquel (Génesis 35:24) a quien su padre Jacob había perdido (Génesis 44:18–31). Esa pérdida es lo que Judá le ha estado explicando, incluido el hecho de que su anciano padre se moriría si perdiera al otro hijo que le quedaba de su esposa Raquel. Judá dejó claro que él mismo sería el responsable de la pérdida de Benjamín por el resto de su vida. Por eso, prometió que se haría cargo de él. Este compromiso era un acuerdo serio y vinculante. Judá sería formalmente responsable para el resto de su vida de la pérdida del niño y la consiguiente muerte de su padre.Esta súplica apasionada no carecía de propósito. Judá ha reconocido su propia culpa, al menos de manera indirecta (Génesis 44:16), y sabía que estaba siendo castigado por lo que le había hecho a José muchos años antes (Génesis 37:24–28). Demostrando que había aprendido algo de todo esto, Judá le hará una proposición desinteresada al gobernador de Egipto durante el siguiente versículo (Génesis 44:33).