¿Qué significa Hebreos 11:27?
Este versículo representa una transición con respecto a Moisés, una que fácilmente se pasa por alto cuando el versículo se saca de su contexto inmediato. Anteriormente, el libro de Hebreos definía la fe piadosa como una confianza en Dios que mira hacia el futuro y que, a pesar de nuestra propia ignorancia, produce obediencia (Hebreos 11:1–3). La historia de Moisés se presentó como un ejemplo de ese tipo de fe. Específicamente, Moisés eligió identificarse con su pueblo de nacimiento, la nación perseguida de Israel, en lugar de su pueblo adoptivo, los egipcios, quienes eran ricos pero malvados (Hebreos 11:24–26). Esa disposición a valorar las promesas de Dios más que las riquezas terrenales se le atribuye a Moisés como el tipo de fe que mira hacia el futuro que Dios requiere de nosotros (Hebreos 11:10–16).Aquí, el texto menciona que Moisés "salió" de Egipto. Esto podría entenderse de dos maneras: la primera es una referencia a la salida inicial de Moisés de Egipto, quien huyó después de matar a un esclavista abusivo que estaba golpeando a un compañero israelí (Éxodo 2:11–15). Eso, sin embargo, no es a lo que se refiere este versículo. En cambio, el momento de salida que se menciona aquí es la del Éxodo mismo. El papel de Moisés a la hora de sacar a Israel de la esclavitud en Egipto requirió que se enfrentara a la ira del faraón. En lugar de rehuir este deber, Moisés obedeció a Dios (Éxodo 5:1; 12:40–41). Los siguientes versículos nos ayudarán a aclarar que el escritor de Hebreos ahora está hablando de este evento en particular.
En pasajes anteriores se mencionaba que Dios hace cosas visibles a partir de cosas invisibles; Dios obra de maneras que no siempre podemos ver ahora, pero que veremos más adelante. Moisés confiaba en Dios y "se mantuvo firme" a la hora de enfrentarse a las dificultades y a las dudas, las cuales fueron el resultado de retar al rey de Egipto.