¿Qué significa Hebreos 12:12?
El escritor continúa usando el atletismo como una analogía para el crecimiento espiritual. En versículos anteriores, mencionó que la disciplina de Dios era algo que se esperaba de un buen padre, y especialmente de un Padre celestial (Hebreos 12:5–9). La disciplina nos corrige y nos aleja del pecado; nos entrena para exhibir una fe más profunda y confiar más en Dios. Este capítulo comenzó con una frase de ánimo: "correr la carrera" que Dios nos ha asignado (Hebreos 12:1). El versículo anterior menciona cómo el crecimiento espiritual se obtiene a través del "entrenamiento" y usa un término griego que se relaciona específicamente con el ejercicio vigoroso.Aquí vemos palabras que un entrenador podría decirle fácilmente a un atleta. Espiritualmente, este pasaje anima a los cristianos a seguir adelante a través de las dificultades. Esas experiencias son ciertamente dolorosas en el momento (Hebreos 12:11), pero una vez que las hemos pasado, podemos ver cómo Dios usó esas luchas para "entrenarnos". Estas palabras no solo sirven como un buen consejo deportivo y un buen consejo espiritual, sino que probablemente también se hayan tomado directamente del Antiguo Testamento. Isaías 35:3 dice casi exactamente lo mismo, también en el contexto de ánimo y perseverancia.