¿Qué significa Hebreos 13:3?
Los versículos anteriores enumeraron algunas instrucciones prácticas para los creyentes cristianos, como el hecho de demostrarnos amor fraternal (Hebreos 13:1) y el cuidado de los extraños (Hebreos 13:2). El amor por los hermanos cristianos se menciona constantemente en la Biblia como prueba de la fe de que hemos puesto en Dios (Juan 15:12; 1 Juan 4:20). Las Escrituras no solo contienen la enseñanza de Jesús de que nuestra actitud hacia los extraños refleja nuestra actitud hacia Él (Mateo 25:35–40), sino que también incluye historias en las que esos extraños eran en realidad ángeles (Génesis 19:1–3).Este versículo completa una serie de pensamientos que se asemeja mucho a las palabras de Jesús en Mateo 25. Allí, Jesús habló sobre la necesidad de que los cristianos se preocupen por los necesitados, los extraños y los encarcelados. Los versículos anteriores mencionaban a los hermanos creyentes y extraños, y aquí se les manda a los cristianos cuidar de los que están en prisión. Esta carta fue escrita para los cristianos judíos que estaba siendo perseguidos, aunque señala claramente que aquellos que originalmente leyeron la carta no habían sufrido tanto como otros creyentes lo habían hecho (Hebreos 12:4). Aquellas personas que no eran libres, ni tenían derechos, ni tenían ninguna propiedad, se merecen el apoyo y la simpatía de los creyentes.
El escritor de Hebreos también incluye a aquellos que son "maltratados" en sus mandamientos. Esto viene del término griego kakouchoumenōn, el cual se usa solo dos veces en el Nuevo Testamento. La otra aparición está en Hebreos 11:37; allí, se le aplica a ejemplos de personas que tienen una fe piadosa y sufren persecución y martirio. Esto encaja bien con uno de los temas principales del libro de Hebreos: que los creyentes deben "mantenerse firmes" a través del sufrimiento, teniendo en cuenta los sufrimientos de los demás en el nombre de Cristo.