¿Qué significa Hebreos 9:25?
Bajo el antiguo pacto, Dios le ordenó a Moisés que construyera dos habitaciones dentro del tabernáculo, que era un templo móvil construido por el pueblo de Israel. El primero se llamaba el Lugar Santo, y dentro de él estaba el segundo: el Lugar Santísimo. Estas áreas estaban restringidas solo a ciertos sacerdotes en ciertos momentos, lo cual estaba destinado a simbolizar la separación que existía entre Dios y las personas. Estas áreas también se utilizaron como lugar para los sacrificios de animales, que eran necesarios para el perdón de los pecados del pueblo de Israel. Desafortunadamente, esos sacrificios no pudieron cambiar a la gente desde adentro y solo pudieron ofrecer un respiro temporal.Tal y como se nos decía durante el último versículo, el servicio de Cristo como nuestro sumo sacerdote ocurre en un lugar mejor. De hecho, ocurre "en el mismo cielo", un lugar que los servicios terrenales solo podían alcanzar a través del simbolismo. Aquí, el escritor de Hebreos señala que el sacrificio de Cristo es superior al ofrecido por los sacerdotes terrenales. En lugar de ir una y otra vez, sacrificarse a Sí mismo una y otra vez, Cristo puede ofrecer un derramamiento de sangre único, perfecto y permanente para cubrir el pecado humano. Esta idea continúa en el siguiente versículo.