¿Qué significa Marcos 10:51?
Esta es la misma pregunta que Jesús les hizo a Jacobo y Juan cuando querían posiciones importantes en Su reino (Marcos 10:35–37). Pedirle cosas a Dios no está mal; Jesús dice: "pidan, y se les dará…" (Mateo 7:7). Pero Santiago, el medio hermano de Jesús, el pastor de la iglesia en Jerusalén advierte: "…cuando piden algo, no lo reciben porque lo piden con malas intenciones, para gastarlo en sus propios placeres" (Santiago 4:3). Cuando oramos y le pedimos a Dios que satisfaga nuestros deseos, debemos darle permiso para profundizar en nuestra petición; quizás podemos tener motivos puros, como Bartimeo, quien reconoce su total dependencia de Jesús, o quizás estemos tratando de usar a Jesús para nuestro propio beneficio. De cualquier manera, nuestra conversación con Dios nos ayuda a crecer espiritualmente."Rabboni", como aparece en griego, es una variante de la palabra rabino, pero que tiene un sentido más fuerte de señor y amo. La única vez, además de ésta, que se usa en la Biblia es cuando María Magdalena se encuentra con Jesús después de la resurrección (Juan 20:16). Los eruditos se preguntan si Bartimeo estaba siendo especialmente cortés, para que Jesús lo sanara, o si realmente entendía que Jesús era el Mesías, el Hijo de David (Marcos 10:47–48).
A Jesús le gusta interactuar directa y personalmente con las personas que cura, pero la fe y el entusiasmo de Bartimeo acortan su encuentro. A diferencia del sordo de Decápolis (Marcos 7:31–37) y el ciego de Betsaida (Marcos 8:22–26), Jesús no tiene que apartar a Bartimeo para protegerlo de la multitud o hacerle saber lo que está sucediendo. Bartimeo está listo y Jesús lo sana (Marcos 10:52).