¿Qué significa Marcos 11:18?
Los sacerdotes, escribas y fariseos tienen una larga lista de razones por las que quieren a Jesús muerto. Jesús afirma poder perdonar los pecados (Marcos 2:5–7), se socializa con pecadores (Marcos 2:15–17), no sigue sus rígidas tradiciones (Marcos 2:23–24; 7:1–5), sana a las personas durante el sábado (Marcos 3:1–6), y desafía su carácter y su fidelidad a Dios (Marcos 7:6–13; 8:11–12). Todo eso podría haber sido ignorado, excepto por el hecho de que también es muy respetado y honrado por la gente. Incluso Pilato, al enfrentarse a la decisión de qué hacer con Jesús, "…sabía que los principales sacerdotes lo habían entregado por envidia" (Marcos 15:10).La condena de Jesús hacia los principales sacerdotes y escribas es irónica aquí porque ¡en realidad Jesús está imponiendo la tradición de los escribas! En el Seder Zeraim, Berajot, los escribas prohibieron los bastones, las sandalias y las carteras en el Monte del Templo, con el objetivo de evitar la misma situación que ahora ha provocado que Jesús limpie el templo; los escribas anteriores prohibieron los instrumentos de viaje y comercio a fin de garantizar que el templo se usara únicamente para la adoración. Los líderes religiosos han roto sus propias reglas al permitir que cambistas, comerciantes y peatones entren en el patio del templo.
Juan 12:12–50 nos da más detalles sobre lo que Jesús está enseñando, que acaba molestando tanto a los principales sacerdotes y a los escribas. Jesús les dice a algunos griegos curiosos que morirá y será glorificado, lo que dará como resultado una gran cosecha. También dice que aquellos que lo siguen deben estar dispuestos a sacrificarse para obtener la vida eterna. Jesús reconoce que Su alma está afligida al pensar en lo que está por venir, pero sabe que ha venido para cumplir la voluntad de Dios y glorificar Su nombre. En respuesta, Dios habla desde el cielo, sorprendiendo a la multitud que rodea a Jesús. Jesús reitera que será "levantado", es decir, crucificado. La gente muestra que está confundida en cuanto a cómo podría llegar a morir el Hijo del Hombre mencionado en Daniel 7, a quien el Anciano entrado en años le dará todo el dominio.
No todas las personas comprenden o creen a Jesús. Dios ciega y endurece a algunos para que no puedan afirmar desde su propio orgullo e inteligencia que han llegado a comprender la salvación sin la ayuda de la gracia de Dios o la sumisión a Jesús. Algunos creen en Jesús, pero permanecen en silencio por temor a perder sus posiciones (Juan 12:42). Jesús también condena a los que no le creen, diciendo que Dios los juzgará en el último día. Los sacerdotes y los escribas no pueden permitir que Jesús siga viviendo, quien decía que serán juzgados por el mismo Dios al que supuestamente ellos mismos creían estar sirviendo perfectamente.