¿Qué significa Marcos 12:11?

Este versículo continúa la una cita de la versión Septuaginta del Salmo 118:22–23, en la que se describe cómo reaccionó la gente a la providencia de Dios, quien tomó una piedra que fue rechazada para la construcción del santuario del templo e hizo que finalmente esa piedra fuera una pieza fundamental para el pórtico del templo. Este es un ejemplo de un evento histórico que al mismo tiempo tiene un significado simbólico. La "piedra", en el judaísmo, representa a Abrahán, David o el Mesías. Algunos pensaban que los "constructores" representaban a los escribas, quienes eran los expertos en la ley.

Este es un punto clave para saber cómo actúa Dios en la historia de la humanidad, ya que, de hecho, Abrahán no era una persona especial que acabó ganándose el favor de Dios a través de lo que hizo. Dios eligió bendecirlo como padre de Su pueblo debido a Su buena gracia. David era un niño pastor, el más joven de una familia numerosa, y ni mucho menos se situaba cerca de la línea de descendientes del rey Saúl, cuando Dios decidió ungirlo como rey. De manera similar, ya se había dicho que el Mesías no tendría una majestuosidad y belleza que automáticamente atraería a otros hacia él (Isaías 53:2).

Esta situación se aplica a nosotros también: "porque a su debido tiempo, cuando aún éramos débiles, Cristo murió por los pecadores" (Romanos 5:6). No hay nada que podamos hacer para ganarnos la salvación. Todo es un regalo de Dios, un regalo que solo se nos puede dar a través del sacrificio de Jesús (Efesios 2:8–9): cuando aceptamos que somos "pobres en espíritu", Dios nos da la posibilidad de entrar en el reino de Dios (Marcos 10:15).

A pesar de toda la ley y la tradición, "Dios eligió lo necio del mundo, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo, para avergonzar a lo fuerte" (1 Corintios 1:27). A pesar de nuestras dudas iniciales y nuestro escepticismo sobre ese plan, si realmente lo seguimos, nos daremos cuenta de que Su plan es realmente "maravilloso".