¿Qué significa Marcos 15:34?
Muchos se preguntan por qué Jesús mostró tanta angustia al anticipar la cruz en el huerto de Getsemaní (Marcos 14:32–42). Jesús les dijo a Pedro, Jacobo y Juan: "siento en el alma una tristeza de muerte. Quédense aquí, y manténganse despiertos" (Marcos 14:34). Sumisamente le suplicó a Dios que evitara lo que estaba a punto de suceder. "Lleno de angustia, oraba con más intensidad. Y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra" (Lucas 22:44).Desde ese momento, ha sido traicionado, arrestado, abandonado, torturado y clavado en una cruz. Sin embargo, muchos se preguntan por qué aparentemente se mostró tan reacio. Jesús "sólo" sufrió durante seis horas en la cruz. Desde el arresto hasta Su muerte pasó menos de un día completo; y en el momento en que murió, volvió al cielo (Lucas 23:43).
Jesús, el hombre físico nacido en la tierra, sufre durante los juicios y en la cruz, pero Jesús, Dios el Hijo, sufre mucho peor. Por primera vez en la historia, se siente separado de Dios el Padre. Tratar de articular esto de una manera significativa podría llevarnos accidentalmente a cometer una herejía. La naturaleza exacta de la Trinidad, por definición, está más allá del entendimiento humano. Sin embargo, la Escritura es clara en cuanto a que la ejecución del sacrificio de Jesús en la cruz involucra algo mucho, mucho más grande y espiritual que simplemente la muerte del cuerpo. De alguna manera esotérica, la Trinidad, la realidad de la santa unidad y el amor, se ve afectada. Jesús sufre, pero peor aún, sufre solo.
Las palabras que Jesús dice se encuentran al comienzo del Salmo 22, otra profecía importante sobre el Mesías. En lugar de que esto sea un grito de confusión o incertidumbre, lo que Jesús dice aquí es un recordatorio de lo que está sucediendo y por qué.
Sacado de contexto, parece que Jesús le está pidiendo información a Dios, pero Jesús sabe exactamente por qué Dios lo ha abandonado: es porque el peso del pecado del mundo ha sido puesto sobre los hombros de Jesús, y Dios no puede soportar verlo o estar en comunión con Aquel que lo lleva. Aun así, es apropiado que Jesús pregunte. El grito expresa Su confusión emocional, así como la injusticia moral de Su situación. Jesús no es un pecador, sin embargo, "al que no cometió ningún pecado, por nosotros Dios lo hizo pecado, para que en él nosotros fuéramos hechos justicia de Dios" (2 Corintios 5:21).