¿Qué significa Marcos 15:5?
Cuando el Sanedrín trata de encontrar testimonios falsos contra Jesús, Jesús no se defiende (Marcos 14:55–60). Inmediatamente después de esta entrevista con Pilato, Jesús se niega a decir una palabra en defensa a Herodes Antipas (Lucas 23:9). Jesús habla para aclarar Su identidad como el Hijo de Dios, el Mesías (Marcos 14:61–62) y el Rey de los judíos (Juan 18:36). También se relaciona con Pilato para darle al gobernador la oportunidad de reconocer la verdad sobre Su identidad (Juan 18:37–38).En Isaías 53:7, el Siervo sufriente se describe como un cordero que no abre la boca. En la medida en que esto se aplica a Su muerte inminente, Jesús nunca "abre la boca" para defenderse de acusaciones falsas. Por lo tanto, no hace nada para escaparse del camino que le estaba llevando hacia la cruz. Jesús habla, pero nunca dice nada para ayudar a Su propia causa. Pilato está asombrado. él sabe que los argumentos del Sanedrín dejan mucho que desear, y Jesús puede evitar la muerte simplemente defendiéndose; pero no lo hace.
Entre Marcos 15:5 y 6, Jesús se enfrenta a otro juicio (Lucas 23:6–12). Herodes Antipas, el tetrarca de Galilea y Perea, está en Jerusalén, posiblemente para la Pascua. Al comienzo del ministerio de Jesús, Herodes mató a Juan el Bautista por las declaraciones que hizo sobre su esposa, Herodías (Marcos 6:14–29). Herodes ha estado preocupado por Jesús, pensando que es Juan el Bautista resucitado de entre los muertos (Marcos 6:14–16), y sus seguidores han estado conspirando para matar a Jesús desde el principio (Marcos 3:6). Los fariseos le advirtieron a Jesús que Herodes quería matarlo; Jesús respondió llamándolo zorro (Lucas 13:31–32).
Cuando los dos finalmente se encuentran, es Herodes quien hace las preguntas, los principales sacerdotes y los escribas dicen calumnias y Jesús permanece en silencio. Herodes probablemente había esperado una conversación significativa, como la que había compartido con Juan el Bautista (Marcos 6:20), o al menos algún milagro que otro. Cuando Jesús no obedece, Herodes y sus soldados lo golpean y se burlan de él, luego Herodes envía a Jesús de regreso a Pilato. Herodes y Pilato se hacen amigos, pero aún así no tienen pruebas de que Jesús haya hecho algo malo.