¿Qué significa Marcos 3:8?
Personas con problemas de salud, personas poseídas y curiosos en general acuden en masa para ver a Jesús desde muchos lugares diferentes. Jerusalén está a unas 85 millas al sur de Cafarnaún. Tiro y Sidón están a unas 35 y 50 millas, respectivamente, al noreste, en la costa sirofenicia. Idumea, el nombre griego de Edom (Génesis 36:1–8), estaba localizada en este momento en el área al sur de Judea; y, la frase "del otro lado del Jordán" probablemente se refiere a Perea, el territorio de Herodes Antipas al sur de Galilea, al otro lado del río Jordán y el Mar Muerto.El pico de popularidad de Jesús presenta varios problemas. Jesús está tan abrumado físicamente por el tamaño de la multitud que realmente no puede enseñar. Para los fariseos y los herodianos, Su influencia amenaza sus posiciones sociales; peor aún, en sus mentes, la fama de Jesús podría traer repercusiones militares desde Roma si Jesús resultara ser un revolucionario político.
Aunque Jesús toma precauciones por Su propia seguridad (Marcos 3:9), se sigue encontrado voluntariamente con personas que vienen a verlo, reconociendo así que necesitan a Jesús y han viajado grandes distancias para conocerlo. Jesús no los rechaza. Esta puede ser una de las formas más difíciles en las que estamos llamados a emular a Jesús. Cuando llegan momentos difíciles y necesitamos a Cristo con nosotros, debemos decidir cuál será nuestra respuesta: puede ser una conversación intensa, hasta altas horas de la noche, o una confrontación sobre el pecado que no queremos tener. La persona que está teniendo el problema puede que ni siquiera se dé cuenta de que lo que necesita es Jesús. Dios nos ha dado el trabajo de mostrarles Su amor a los demás y también debemos traerlos de vuelta con Dios.
Nuestras vidas, una vez están influenciadas por Cristo, atraen a otros que también necesitan un cambio en sus vidas; Dios nos invita a formar parte de Su obra cuando nos permite tener encuentros con personas que también necesitan a Dios tanto como nosotros.