¿Qué significa Marcos 6:50?
Los discípulos han visto algo que no esperaban: a Jesús caminando sobre la superficie del agua, durante una tormenta de viento. Como cabría esperar, su primera reacción es tener miedo. "ánimo" aquí viene de la palabra griega raíz tharseo que significa "coraje o alegría". Jesús quiere que Su milagrosa aparición les de coraje y alegría a los Doce. Eso solo será posible si sus corazones se abrieran y aceptaran Su liderazgo. En cambio, sus corazones se endurecen (Marcos 6:52) y reaccionan con miedo.Se cree que Marcos obtuvo gran parte de su información de Pedro. Esta puede ser la razón por la cual Marcos no cubre uno de los eventos más notables de esta historia. Después de que Jesús les dice a los Doce que "se animen", Pedro le dice con valentía a Jesús: "Señor, si eres tú, manda que yo vaya hacia ti sobre las aguas" (Mateo 14:28). Pedro es capaz de dar unos pasos hacia Jesús, pero cuando deja de mirar a Jesús y mira las olas, su fe vacila y comienza a hundirse. Jesús lo rescata y suben a la barca (Mateo 14:29–32). Los escritores antiguos, particularmente los del Nuevo Testamento, parecen evitar contar historias que podrían ser malinterpretadas como una forma de alardeo.
Los humanos somos criaturas cuanto menos irónicas. Cuando nos sentimos amenazados o confundidos, tendemos a cerrar nuestros corazones y tratar de protegernos hasta que comprendamos mejor la situación. El problema viene cuando consideramos a Dios como parte de esa amenaza. Dios puede hablar en contra de nuestro estilo de vida o pedirnos que hagamos algo de lo que no estamos seguros. Cuando consideramos las circunstancias, es fácil tener miedo y cerrarse.
Nos perdemos muchas cosas cuando nuestros corazones se endurecen. Cuando tenemos miedo, dejamos de ver a Dios tal y como es él. Cuando Dios tiene que recordarnos constantemente que no tengamos miedo de nuestro entorno o de Su poder y gloria, esto retrasa el avance de nuestra relación que tenemos con él y nos impide unirnos plenamente en Su obra. Dios nos llama a pensar en él constantemente. Cuando mantenemos nuestros ojos centrados en él y recordamos todo lo que él ha hecho por nosotros, el miedo desaparece y podemos obedecerlo con confianza.
Marcos 6:45–52 contin&uactue;a aumentando el alcance de los milagros de Jesús, que van desde curar enfermedades y heridas (Marcos 1:33–34) hasta resucitar a los muertos (Marcos 5:35–43). Desde exorcizar un demonio (Marcos 1:23–26) hasta expulsar a una horda de ellos (Marcos 5:1–15). Desde calmar el mar de Galilea (Marcos 4:35–41) hasta este relato, donde Jesús camina sobre las aguas. A&uactue;n así, los Doce contin&uactue;an malentendiendo quién es Jesús realmente y qué ha venido a hacer. Los Doce piensan que él será el rey y salvará a Israel de los romanos. Al decirles que se fueran antes que él, Jesús los está protegiendo de una multitud que cree lo mismo. Este milagro también se encuentra en Mateo 14:22–33 y Juan 6:16–21.
Jesús regresa a Su ciudad natal de Nazaret, pero la gente allí es infiel y escéptica. Como resultado, Jesús no realiza más que unos pocos milagros pequeños. Luego, Jesús les dice a Sus doce apóstoles que viajen en parejas para predicar el arrepentimiento y sanar enfermedades. Marcos luego se toma un breve descanso para explicar la muerte de Juan el Bautista, quien fue decapitado después de que Herodías (la esposa de Herodes Antipas) engañara a Herodes Antipas. Más tarde, el enfoque se vuelve a Jesús de nuevo, donde se le presenta alimentando milagrosamente a miles de personas, caminando sobre el agua y sanando a las personas en Genesaret.