¿Qué significa Marcos 6:9?
Jesús está enviando a los Doce hacia su primer viaje misionero sin él. Jesús les ha dado autoridad sobre la enfermedad, los demonios e incluso la muerte (Mateo 10:8), pero ha restringido severamente lo que pueden llevar con ellos mismos. Tampoco se les permite llevar comida, dinero o una bolsa (Marcos 6:8).El comentario sobre el uso de sandalias nos brinda una oportunidad para debatir e investigar el tema. En el pasaje paralelo en Mateo 10:9–10, Jesús dice: "no lleven consigo oro ni plata ni cobre, ni mochila para el camino, ni dos túnicas, ni calzado, ni bastón; porque el obrero es digno de su alimento". Se han hecho muchas especulaciones sobre esto, pero la respuesta se puede encontrar en la redacción misma. Marcos dice que podían llevar sandalias. Mateo dice "no [las] lleven". Al igual que con las túnicas, Jesús les dice a los Doce que usen un par de sandalias pero que no compren ni tomen un par extra.
La palabra raíz griega traducida "túnica" es chiton y se refiere a una prenda interior que se lleva junto a la piel debajo de una capa. Esta es la prenda que los soldados se echaron a suertes durante la crucifixión (Juan 19:23). Llevar dos garantizaría que uno pudiera protegerse del frío por la noche, pero Jesús tiene la intención de que se queden en sus hogares y no a la intemperie (Marcos 6:10).
Este estilo de misiones, viajar a algún lugar para predicar y esperar el apoyo de aquellos a quienes predicamos, no es muy común en el mundo de hoy. La responsabilidad de la hospitalidad no es tan común en las culturas europeas. En algunas áreas, recibir misioneros cristianos es peligroso, y los misioneros occidentales están acostumbrados a recibir más ayuda que solo una cama de heno en un granero o una sola comida de pan. Aún así, todo esto debería hacernos pensar acerca del nivel de intimidad que los discípulos llegaron a tener con aquellos a quienes ministraron. El hecho de que podemos conducir un automóvil al final del día y cerrar la puerta de nuestra propia casa hace que nuestra vida sea más fácil, pero debemos estar abiertos a los momentos en que Jesús espera que hagamos cosas que se salgan de nuestra zona de confort por el bien del evangelio.