¿Qué significa Marcos 7:12?

La relación entre los fariseos y la gente es interesante. Los fariseos no tienen autoridad legal, y no tienen vínculos directos con los sacerdotes o el templo. Son líderes laicos que estudian a fondo las leyes mosaicas y orales y tratan de vivir de acuerdo con lo que leen. Al hacerlo, llegan a valorar la ley más que al Legislador. Ven a las personas a través de la lente de la ley: ¿la siguen o no? Esto contrasta con el hecho de ver a las personas a través de la lente del amor y la gracia de Dios. La disciplina de los fariseos merece un poco de respeto (Mateo 5:20), pero su supuesto poder profético sobre la gente no es ni saludable ni bíblico.

Aun así, es muy efectivo. Gamaliel era un fariseo en el concilio, un maestro de la ley, no un sacerdote, cuando sugirió que el movimiento cristiano se extinguiría si no fuera de Dios (Hechos 5:33–42). En realidad, no estamos seguros de si Pablo era un fariseo "oficial", o si solo estaba estudiando para serlo (Filipenses 3:5), pero tenía la autoridad para capturar, encarcelar y votar por la muerte de cristianos, incluso aquellos que estaban fuera de Israel (Hechos 26:10–11).

Cuando Jesús dice que los escribas y los fariseos no les "permiten" a los judíos romper un juramento por el bien de sus padres, Jesús expresa la influencia que los maestros tienen sobre la gente. Esa retención ocurre a pesar de que existan algunas contradicciones bastantes serias. 1. La Mishná tiene secciones que priorizan el mandamiento sobre el voto imprudente, pero aparentemente algunos de los escribas y fariseos no estuvieron de acuerdo sobre esto. 2. Las Escrituras mismas. Levítico 5:4–6 dice que si alguien se da cuenta de que es culpable de un voto imprudente y pecaminoso, puede hacer expiación. Es mejor reconocer el pecado y tratar con él que continuar cometiéndolo a expensas de los demás.