¿Qué significa Marcos 9:44?
Este versículo no se encuentra en las transcripciones más antiguas y confiables. éste y el versículo 46 son idénticos a Marcos 9:48. Es posible que esta frase haya sido añadida por un copista que, con todas sus buenas intenciones, estaba intentando armonizar cada declaración. Jesús cita esto usando Isaías 66:24, donde se describe el destino de los pecadores que se enfrentan el juicio final de Dios.Jesús acaba de decir que sería mejor cortarse la mano y tener vida eterna que tener las dos manos y entrar al infierno. En los siguientes versículos, dirá lo mismo sobre cortarse un pie o rasgarse un ojo. ésta es una forma tradicional de decir que debemos usar cualquier medida necesaria para prevenir el pecado en nuestras vidas.
Esta idea no es muy común en la cultura actual. En la actualidad, la disciplina es una característica de las personas que parece valorarse sólo como un método para ganar dinero, ponerse en forma o dominar una nueva habilidad. El mundo está menos interesado en utilizar la disciplina como un método para evitar el pecado.
En contraste, los escribas judíos eran expertos en establecer "cercas" alrededor de la ley de Dios para que la gente ni siquiera se acercara a la posibilidad de cometer un pecado, y codificaron estas cercas a través de la Ley Oral. Los fariseos eran expertos en seguir esas reglas que se habían añadido a través de la Ley Oral.
Jesús respondió señalando que obedecer verdaderamente la Ley Mosaica ya era bastante difícil de por sí. Obedecer el espíritu de la Ley ya era bastante difícil: no solo se debía evitar el asesinato, sino que se debía evitar la ira interior que lo provocaba (Mateo 5:21–22); no solo se debía evitar el adulterio, sino que se debía evitar que éste nos tentara interiormente (Mateo 5:27–28). Debemos ir más allá a la hora de amar a los demás sometiéndonos a las necesidades de aquellos que nos engañan y abusan de nosotros (Mateo 5:38–48). Si queremos ganarnos el cielo, debemos ser perfecto.
Por supuesto, ninguno de nosotros puede ser perfecto. Entonces, Jesús vino y murió por nuestros pecados. Es bueno tratar de obedecer la voluntad de Dios y sus mandamientos. Sin embargo, es mejor darse cuenta también de que nunca lo haremos a la perfección, y que necesitamos la gracia de Dios.