¿Qué significa Mateo 12:16?

Las multitudes continuaban siguiendo a Jesús, y Él continuaba sanando a todos los que acudían a Él en busca de ayuda (Mateo 12:15). Jesús también les decía que no se lo dijeran a nadie. Es decir, les decía que no hablaran de la manera en que había sido curados, y que quizás tampoco dijeran que Él era el Mesías.

¿Por qué les diría a todos que no dijeran nada? En realidad, no lo sabemos a ciencia cierta. Jesús pudo haber estado tratando de no llamar la atención de los líderes religiosos judíos, quienes querían matarlo (Mateo 12:14); o pudo haber estado tratando de lidiar con el tamaño de las multitudes que lo seguían. Parte de Su misión era curar a Israel y demostrarle el poder de Dios, pero quizás quería evitar que las multitudes crecieran tanto que los romanos comenzaran a verlo como una especie de amenaza revolucionaria. Muchas personas que creían que Él era el Mesías creían que Él iba a usar Su poder para derrotar a los opresores romanos (Juan 6:15). Jesús no había venido a hacer eso, ni tampoco quería que la gente pensara de esa manera.

Sin embargo, Mateo nos ha dado varios ejemplos de personas que inmediatamente desobedecieron la orden de Jesús de no decir nada sobre Sus milagros. Estas personas estaban llenas de entusiasmo y alegría por lo que habían visto, experimentado, y por la persona que había hecho todo eso por ellos.