¿Qué significa Mateo 18:15?
Durante los versículos anteriores, Jesús les ha advertido a Sus discípulos acerca de lo serio que es causar que otros creyentes pequen. También les ha advertido que no desprecien ni les falten el respeto a otros creyentes, incluso a los que se hayan descarriado. Después de todo, la voluntad de Dios Padre es que ninguno de los creyentes en Jesús perezca o se separe eternamente de Él (Mateo 18:10–14).Sin embargo, ¿qué debe hacer la comunidad de creyentes si alguien cae en el pecado? ¿Cómo pueden tomarse en serio el pecado y tratar de traer al pecador de vuelta a Dios? Jesús nos ofrece aquí el proceso a seguir cuando ocurra eso.
Jesús comienza describiendo una situación en el que un creyente peca. Algunos eruditos se preguntan de la manera que debían leerse las palabras "contra ti" en este versículo. Algunos manuscritos griegos más antiguos no contienen esas dos palabras, simplemente dicen "si tu hermano peca". ¿Está Jesús hablando de alguien que peca por sí mismo o contra otro creyente? ¿O alguien que ofende a otra persona o hace algo desagradable? ¿O es alguien que peca de una manera clara y evidente? Al fin y al cabo, nos parece razonable que se aplique este mismo proceso en todos los casos.
Si hay otro creyente en Jesús que peca contra nosotros, o si nos damos cuenta de que otro seguidor de Jesús está pecando de manera clara, Jesús insiste en que el primer paso siempre es tener una conversación privada con esa persona. Este es a menudo el paso más efectivo para ayudar a cualquier persona a reconocer y arrepentirse del pecado. Sin embargo, es probable que solo funcione si uno se acerca a esa persona con amor y humildad y sin despreciarla, tal y como lo haría un niño. El objetivo es mantener a esta persona cerca como a un hermano o hermana, y no avergonzarla ni humillarla.
Si esa persona no se arrepiente, y todavía estamos convencidos de que esa persona sigue pecando, debemos invitar a otras personas a que se unan a la conversación (Mateo 18:16).