¿Qué significa Mateo 23:17?
Cristo está condenando a los líderes religiosos de Israel debido a que hacían "juramentos" engañosos, llenos de sus propios entresijos, para finalmente hacer lo que ellos querían hacer desde el principio. De hecho, estas personas decían que había ciertas cosas que se relacionaban con Dios sobre las que se podían hacer juramentos y otras sobre las que no, debido a que algunas cosas eran vinculantes, pero otras no lo eran. Jesús les acaba de decir que, según ellos: "si alguno jura por el templo, no es nada; pero si alguno jura por el oro del templo, debe cumplir el juramento" (Mateo 23:16).Jesús ahora los llama insensatos ciegos (Mateo 15:12–14; Juan 9:39–41) por haberse inventado ese tipo de distinciones. Usando una pregunta retórica, Jesús hace una distinción entre el oro y Aquel que hacía que el oro fuera sagrado. ¿Pensaban los fariseos que el oro era más valioso porque tenía valor terrenal, o pensaban que el oro era sagrado porque estaba en el templo? Si creían que el oro era sagrado porque estaba en el templo, entonces deberían haber creído que templo en sí era muchísimo más valioso que el oro. Por tanto, Jesús condenó la manera en que valoraban el oro y el templo.
Al mismo tiempo, Jesús les vuelve a criticar aquí por hacer juramentos que en realidad no eran sinceros. Los fariseos enseñaban que algunos de los juramentos eran vinculantes, mientras que otros no lo eran. Hacer una distinción de este tipo provocaba que se hicieran juramentos sin sentido, por lo que la palabra de una persona perdía todo su valor. Tal y como enseñó Jesús durante el Sermón de la Monte, lo correcto es decir "sí" o "no" y después hacer lo que uno dijo que iba a hacer, así de simple (Mateo 5:33–37).