¿Qué significa Mateo 23:29?
Jesús condena a los fariseos y a los escribas con otro gran "ay". Debido a su despiadada rebelión contra Dios, se volvieron partícipes de los mismos crímenes en los que participaron sus antepasados. Los líderes religiosos de Israel de la antigüedad persiguieron y mataron a los profetas que Dios les envió para comunicarles mensajes muy duros al pueblo de Israel (Hechos 7:52; Mateo 23:27–28). Esas generaciones decidieron rechazar abiertamente a los mensajeros de Dios.Los fariseos y los escribas de la generación de Jesús eran igualmente culpables, aunque les construyeron memoriales y monumentos a esos mismos profetas quienes fueron atormentados por sus propios antepasados. Jesús está hablando sobre otro ejemplo más de hipocresía de los fariseos: presentar una imagen de sí mismos que al final acababa siendo justo lo contrario. En este pasaje, Jesús nos ha mostrado la manera en que estos líderes religiosos se centraban en las apariencias y el legalismo, mientras que ignoraban o contradecían la verdadera intención que Dios tenía para Su pueblo (Mateo 23:23–24).