¿Qué significa Mateo 24:13?
Jesús está respondiendo a una pregunta que le hicieron Sus discípulos acerca de cuándo vendría el juicio de Dios y cuáles comenzarían a surgir las señales del fin de la era. Jesús ha dicho que después de que Él se fuera (Juan 16:5–7) y antes de que llegara el fin (Apocalipsis 19:11–15), muchos de los presuntos seguidores de Jesús se alejarían de Él. Entonces, el caos moral se intensificaría y el amor cristiano comenzaría a desaparecer del mundo (Mateo 24:3–12).Todo esto nos lleva hacia una de las declaraciones más debatidas de Cristo: la conexión que hizo entre perseverar y alcanzar la salvación. Tal y como pasa con cualquier declaración de las Escrituras, sacar este versículo de contexto nos puede llevar a realizar una mala interpretación del mismo. El contexto inmediato del comentario de Cristo se refiere a lo que iba a ocurrir en el mundo inmediatamente antes de Su segunda venida (Mateo 24:14), y el marco general de Sus enseñanzas aparece también en otros evangelios (Juan 5:24; 10:28–29).
Los intérpretes nos ofrecen tres posibilidades básicas a la hora de entender lo que Jesús quiso decir aquí. Una es que las personas que permanecerán siéndole fieles a Cristo hasta la muerte alcanzarán la salvación eterna, lo que significa que aquellos que se alejen de Él perderán su salvación. En segundo lugar, aquellos que le sean fieles a Jesús de por vida también acabarán alcanzando la salvación. En tercer lugar, aquellos que sobrevivan a los eventos catastróficos que conducirán a la segunda venida de Cristo se salvarán de la muerte y estarán físicamente presentes en Su reino terrenal.
Dado el contexto de los últimos tiempos que aparece este pasaje, lo más probable es que a lo que Jesús se estaba refiriendo era a ese tercer caso: las personas que sobrevivieran a la tribulación se salvarían en el sentido de que la habrían "superado", y continuarían viviendo en el reino milenario. La idea de que la apostasía rechazará las afirmaciones que se hicieron anteriormente sobre la fe es una idea bíblica (1 Juan 2:18–19), pero no parece ser la idea principal que este versículo exacto parece querer comunicarnos, ya que el concepto de que uno pudiera alejarse de la vida eterna se opone a otras de las enseñanzas que compartieron tanto Cristo como los apóstoles (1 Juan 3:14; 5:11–12).