¿Qué significa Mateo 24:44?
Jesús es el Hijo del Hombre, un título que viene de una profecía del Antiguo Testamento (Daniel 7:13) la cual Cristo a menudo se aplicaba a Sí mismo constantemente (Mateo 9:6; 16:27; 20:18). Mientras les estaba enseñando a Sus discípulos en este momento, estaba sentado en el Monte de los Olivos (Mateo 24:3) y podía ver el templo judío perfectamente. Las cosas que está compartiendo todavía no habían sucedido, ya que primero tenía que ser arrestado, juzgado, crucificado y resucitado. Por supuesto, Jesús tampoco había regresado al cielo. En cambio, Jesús estaba con Sus discípulos, entrenándolos.Sin embargo, Jesús les está advirtiendo sobre todo esto con un gran sentido de urgencia. El momento de irse estaba cada vez más cerca (Juan 16:4–5) y el mundo comenzaría a esperar Su regreso como rey y juez (Hebreos 9:28). Jesús ha dejado claro que nadie sabrá cuándo llegará ese momento (Mateo 24:36), nadie podría saberlo. La única forma de estar listo es estar preparado en todo momento (Mateo 24:43). La voluntad que Jesús tenía y tiene para Su pueblo es vivir cada día como si Su llegada pudiera ocurrir en cualquier momento.
La parábola que comparte durante los siguientes versículos nos habla de cómo deberíamos estar preparados para Su regreso.
Mateo 24:36–51 contiene una advertencia explícita que los falsos maestros han ignorado con frecuencia a lo largo de los años. Nadie sabrá el tiempo preciso de Su regreso a la Tierra. Sólo Dios Padre sabe cuándo sucederá. Todos se quedarán sorprendidos por la repentina aparición de esas señales, tal y como la gente fue arrasada por el diluvio de NoÉ. Los seguidores de Jesús deben vivir estando preparados. Jesús usa una parábola para ilustrar esto, en la que dos siervos decidieron hacer cosas diferentes mientras su amo estaba fuera. Uno fue fiel y sabio, y el otro fue malvado. Cuando el amo volvió, el que fue fiel acabó siendo recompensado, y el malvado fue castigado severamente.
Jesús hace una terrible predicción sobre la destrucción del templo. Inmediatamente despuÉs, mientras está sentado en el Monte de los Olivos, Jesús responde a una pregunta de los discípulos. DespuÉs, le preguntan cuándo vendrá el juicio y quÉ señales determinarán Su regreso. Cristo describe un tiempo de agitación y persecución mundial inimaginable, y dice que habrá un momento específico en el que el templo sería profanado, momento en el cual las personas tendrán que salir corriendo para salvar sus vidas. Jesús tambiÉn habla sobre una tribulación que amenazará a todo el mundo y que será interrumpida justo antes de que Él regrese como Rey y Juez. Dado que nadie puede saber cuándo regresará, Sus seguidores debían vivir estando continuamente preparados.