¿Qué significa Mateo 25:30?
El maestro dijo que uno de sus siervos era una persona negligente y malvada (Mateo 25:24–27), y ahora ese siervo se está enfrentando a las consecuencias de sus acciones. El maestro lo expulsó a "las tinieblas de afuera" donde habrá llanto y crujir de dientes. Este tipo de lenguaje se usa a menudo para describir el tormento eterno que se experimentará durante el juicio del infierno (Mateo 8:12; 13:42; 22:13; 24:51; Lucas 13:28). El siervo que rechazó servir a su maestro había sido negligente y malvado y, por lo tanto, acabó siendo arrojado en un lugar donde sufriría para siempre.La idea debería quedarnos bastante clara debido al contexto, aunque es cierto que, a menudo, se ha malinterpretado. La persona que está siendo arrojada a estas tinieblas de afuera no está siendo castigada debido a que no logró reunir suficientes ganancias para su maestro, ni tampoco está siendo castigada debido a su desobediencia. En cambio, fueron sus acciones las que evidenciaron que Él no era un verdadero siervo en absoluto, sino que en realidad fingía serlo. El maestro le había dado un talento, pero el siervo se negó descaradamente a usarlo e incluso comenzó a poner excusas despectivas (Mateo 25:24–25). En cierto sentido, no es que este siervo negligente estuviera perdiendo su servidumbre, sino que en realidad estaba demostrando que nunca fue verdaderamente un siervo en primera instancia. Debido a esto, el maestro decidió rechazarlo.
La idea que quiere comunicarnos Jesús aquí está muy clara. Las personas que se niegan a servirle mientras esperan Su regreso demuestran que no están confiando verdaderamente en Él (Juan 14:15), y también demuestran que no han puesto todas sus esperanzas en Él. Al mismo tiempo, Jesús es el único camino que nos lleva hacia el reino de los cielos y a tener una relación con Dios el Padre. Sin Jesús, no hay esperanza (Juan 3:36).