¿Qué significa Mateo 28:4?
Un destacamento de soldados romanos estaba custodiando la tumba de Jesús (Mateo 27:62–66). Su trabajo era mantenerla sellada y evitar que alguien robara el cuerpo de Jesús. De repente, durante algún momento de la madrugada del domingo por la mañana, un ángel apareció del cielo justo cuando se produjo un terremoto. El ángel hizo retroceder la piedra grande que cubría la tumba y se sentó sobre ella. Jesús ya no estaba dentro cuando todo esto comenzó a suceder.Los soldados romanos normalmente eran hombres fuertes, valientes, y experimentados en la batalla. Por otro lado, quizás estos soldados no tenían tanta experiencia en la batalla después de todo. En realidad, no estamos seguros, pero de lo que sí estamos seguros es que lo que vieron los dejó completamente indefensos. Vieron a un ángel del cielo que parecía un relámpago vestido con la ropa más blanca que uno pudiera imaginarse.
Los soldados se convulsionaron debido al miedo que sintieron, se cayeron y se quedaron en el suelo como si estuvieran muertos. Sin embargo, no habían muerto, sino que simplemente se habían desmayado y se habían quedado completamente inconscientes. Sentir miedo al ver a un ángel es una reacción casi universal, tal y como la Biblia lo registra continuamente (Lucas 1:11–13; 2:9–10; Hechos 10:3–4).