¿Qué significa Mateo 5:8?

Jesús añade otra "bienaventuranza" que será recibida por aquellos que Dios considera que están viviendo de una manera honorable. En la actualidad, a esta lista de bendiciones las llamamos las Bienaventuranzas. Jesús ahora dice que los "limpios de corazón" son bienaventurados, porque verán a Dios. Esto no significa que serán felices, sino que no deben perder la esperanza en ningún momento.

Los cristianos modernos podrían asociar el concepto de la "pureza" directamente con el hecho de haberse liberado de cosas como el pecado sexual o el fracaso moral. Aquellos que escucharon por primera vez las palabras de Jesús podrían haber relacionado el concepto de la "pureza" con el hecho de cumplir o no cumplir la ley de Moisés, o con el hecho de seguir perfectamente las reglas de los maestros judíos. Por lo tanto, "pureza" se entiende en muchas ocasiones como un estado espiritual en el que estamos totalmente libres de pecado.

Sin embargo, Jesús se centró mucho más en la salud espiritual de los corazones de sus oyentes, en lugar de en su capacidad para mantener a raja tabla los rituales de la ley. Jesús predicó en contra de obedecer la ley solo a través de las acciones, en lugar de hacerlo por un amor verdadero hacia Dios. El concepto de "pureza", en su significado más claro y original, se refiere a la idea de que algo es singular, está unificado, no está mezclado con nada más, algo que es consistente. Los puros de corazón están centrados en solo una persona: Dios, y lo hacen desde dentro hacia afuera.

Jesús nos promete aquí que, cuando llegue el reino de los cielos, los que sean puros en su devoción a Dios podrán verlo. En realidad, esto nos revela una idea muy importante acerca del reino de Dios. La mayoría de los judíos aprendían desde una edad muy temprana que nadie podía ver a Dios y continuar viviendo, ya que Dios es Santo. Sin embargo, Jesús dice que los que entren en el reino de los cielos verán a Dios.