¿Qué significa Mateo 6:30?

Jesús les está enseñando incluso a las personas más pobres que preocuparse por el dinero y servir a Dios no pueden ir de la mano. Por un lado, preocuparse no sirve de nada, y no nos ayuda en absoluto (Mateo 6:27). Los hijos y las hijas de Dios pueden confiar en su Padre celestial para que les de todo lo que necesitan. Jesús preguntó en los versículos anteriores por qué deberían preocuparse por la ropa (Mateo 6:28–29); es probable que algunas personas de las que lo estaban escuchando no supieran de dónde vendría el dinero para reemplazar las prendas que llevaban puestas en ese mismo momento. Entonces, Jesús les pidió que pensaran en los lirios, los cuales se visten con esplendor a pesar de no hacer nada para conseguir "esa ropa".

Jesús termina ese pensamiento en este versículo. Dios se preocupa mucho más por Sus hijos que por los pájaros (Mateo 6:26) o por las flores. Los lirios silvestres se consideran aquí solo como "hierba". Brotan, florecen con esplendor y se mueren rápidamente antes de ser rastrillados y quemados. Si Dios les ofrece "ropa" a ellos, dice Jesús, ¿no crees que Dios también le vestirá a usted? Cristo ya ha dicho que recibir las bendiciones de Dios no siempre significa que estaremos bien en el mundo (Mateo 5:3–12), por lo que su provisión a veces puede conducirnos a vivir en una situación en la que carezcamos de lo que nosotros podríamos considerar como "necesidades".

Jesús termina dirigiéndose a los que se preocupan mucho por estas cosas y les llama "hombres de poca fe". Eso podría sonarnos un poco duro a nosotros; es importante recordar que Jesús está hablando con las personas a las que ama, y quería liberarlos del miedo con el que vivían continuamente. Su confianza en Dios debía proporcionarles una paz mental continua. Esto es lo contrario a las personas que confían en el mundo material para cubrir sus necesidades.