Oseas capitulo 2
La Biblia de las Américas
2Contended con vuestra madre, contended, porque ella no es mi mujer, y yo no soy su marido; que quite, pues, de su rostro sus prostituciones, y sus adulterios de entre sus pechos; 3no sea que yo la desnude completamente y la deje como el día en que nació, y la ponga como un desierto, la reduzca a tierra seca y la mate de sed. 4Y no tendré compasión de sus hijos, porque son hijos de prostitución, 5pues su madre se prostituyó; la que los concibió se deshonró, porque dijo: “Iré tras mis amantes, que me dan mi pan y mi agua, mi lana y mi lino, mi aceite y mi bebida.” 6Por tanto, he aquí, cercaré su camino con espinos, y levantaré un muro contra ella para que no encuentre sus senderos. 7Y seguirá a sus amantes, pero no los alcanzará ; los buscará, pero no los hallará. Entonces dirá: “Iré y volveré a mi primer marido, porque mejor me iba entonces que ahora.”
8Pues ella no sabía que era yo el que le daba el trigo, el mosto y el aceite, y le prodigaba la plata y el oro, que ellos usaban para Baal. 9Por tanto, volveré a tomar mi trigo a su tiempo y mi mosto a su sazón. También me llevaré mi lana y mi lino que le di para que cubriera su desnudez. 10Y ahora descubriré su vergüenza ante los ojos de sus amantes, y nadie la librará de mi mano. 11Haré cesar también todo su regocijo, sus fiestas, sus lunas nuevas, sus días de reposo, y todas sus solemnidades. 12Devastaré sus vides y sus higueras, de las cuales decía ella: “Son la paga que mis amantes me han dado.” Y las convertiré en matorral, y las devorarán las bestias del campo. 13Y la castigaré por los días de los Baales cuando ella les ofrecía sacrificios y se adornaba con sus zarcillos y joyas, y se iba tras sus amantes, y se olvidaba de mí — declara el SEÑOR.
14Por tanto, he aquí, la seduciré, la llevaré al desierto, y le hablaré al corazón. 15Le daré sus viñas desde allí, y el valle de Acor por puerta de esperanza. Y allí cantará como en los días de su juventud, como en el día en que subió de la tierra de Egipto. 16Sucederá en aquel día — declara el SEÑOR — que me llamarás Ishí y no me llamarás más Baalí. 17Porque quitaré de su boca los nombres de los Baales, y nunca más serán mencionados por sus nombres. 18En aquel día haré también un pacto por ellos con las bestias del campo, con las aves del cielo y con los reptiles de la tierra; quitaré de la tierra el arco, la espada y la guerra, y haré que ellos duerman seguros. 19Te desposaré conmigo para siempre ; sí, te desposaré conmigo en justicia y en derecho, en misericordia y en compasión ; 20te desposaré conmigo en fidelidad, y tú conocerás al SEÑOR.
21Y sucederá que en aquel día yo responderé — declara el SEÑOR —, responderé a los cielos, y ellos responderán a la tierra, 22y la tierra responderá al trigo, al mosto y al aceite, y ellos responderán a Jezreel. 23La sembraré para mí en la tierra, y tendré compasión de la que no recibió compasión, y diré al que no era mi pueblo : Tú eres mi pueblo, y él dirá: Tú eres mi Dios.
Nueva Biblia de las Américas
2“Discutan con su madre, discutan, Porque ella no es mi mujer, y Yo no soy su marido; Que quite, pues, de su rostro sus prostituciones, Y sus adulterios de entre sus pechos; 3No sea que Yo la desnude completamente Y la deje como el día en que nació, Y la ponga como un desierto, La reduzca a tierra seca Y la mate de sed. 4Tampoco tendré compasión de sus hijos, Porque son hijos de prostitución, 5Pues su madre se prostituyó; La que los concibió se deshonró, Porque dijo: ‘Iré tras mis amantes, Que me dan mi pan y mi agua, Mi lana y mi lino, mi aceite y mi bebida.’ 6Por tanto, voy a cercar su camino con espinos, Y levantaré un muro contra ella para que no encuentre sus senderos. 7Ella seguirá a sus amantes, pero no los alcanzará; Los buscará, pero no los hallará. Entonces dirá: ‘Iré y volveré a mi primer marido, Porque mejor me iba entonces que ahora.’
8Pues ella no sabía que era Yo el que le daba el trigo, el vino nuevo y el aceite, Y le prodigaba la plata y el oro, Que ellos usaban para Baal. 9Por tanto, volveré a tomar Mi trigo a su tiempo Y Mi vino nuevo a su sazón. También me llevaré Mi lana y Mi lino Que le di para que cubriera su desnudez. 10Y entonces descubriré su vergüenza Ante los ojos de sus amantes, Y nadie la librará de Mi mano. 11Haré cesar también todo su regocijo, Sus fiestas, sus lunas nuevas, sus días de reposo, Y todas sus solemnidades. 12Devastaré sus vides y sus higueras, De las cuales decía ella: ‘Son la paga Que mis amantes me han dado.’ Y las convertiré en matorral, Y las devorarán las bestias del campo. 13La castigaré por los días de los Baales Cuando ella les ofrecía sacrificios Y se adornaba con sus zarcillos y joyas, Y se iba tras sus amantes, y se olvidaba de Mí,” declara el SEÑOR.
14“Por tanto, voy a seducirla, Llevarla al desierto, Y hablarle al corazón. 15Allí le daré sus viñas, Y el Valle de Acor por puerta de esperanza. Y allí cantará como en los días de su juventud, Como en el día en que subió de la tierra de Egipto. 16Sucederá en aquel día,” declara el SEÑOR, “que Me llamarás Ishí (esposo mío) Y no Me llamarás más Baalí (mi señor). 17Porque quitaré de su boca los nombres de los Baales, Y nunca más serán mencionados por sus nombres. 18En aquel día haré también un pacto por ellos Con las bestias del campo, Con las aves del cielo Y con los reptiles de la tierra. Quitaré de la tierra el arco, la espada y la guerra, Y haré que ellos duerman seguros. 19Te desposaré conmigo para siempre; Sí, te desposaré conmigo en justicia y en derecho, En misericordia y en compasión; 20Te desposaré conmigo en fidelidad, Y tú conocerás al SEÑOR.
21Y sucederá que en aquel día Yo responderé,” declara el SEÑOR, “responderé a los cielos, y ellos responderán a la tierra, 22Y la tierra responderá al trigo, al vino nuevo y al aceite, Y ellos responderán a Jezreel (Dios siembra). 23La sembraré para Mí en la tierra, Y tendré compasión de la que no recibió compasión, Y diré al que no era Mi pueblo: ‘Tú eres Mi pueblo,’ Y él dirá: ‘Tú eres mi Dios.’”
Nueva Versión Internacional
1»Llamen a sus hermanos: “Pueblo mío”, y a sus hermanas: “Compadecidas”. 2»¡Échenle en cara a su madre que ni ella es mi esposa ni yo su esposo! ¡Que se quite del rostro el maquillaje de prostituta, y de entre los pechos los adornos de ramera! 3De lo contrario, la desnudaré por completo; la dejaré como el día en que nació. La pondré como un desierto: ¡la convertiré en tierra seca y la mataré de sed! 4No tendré compasión de sus hijos, porque son hijos de prostitución. 5Su madre es una prostituta; ¡la que los concibió es una sinvergüenza! Pues dijo: “Quiero ir tras mis amantes, que me dan mi pan y mi agua, mi lana y mi lino, mi aceite y mis bebidas”. 6Por eso le cerraré el paso con espinos; la encerraré para que no encuentre el camino. 7Con ardor perseguirá a sus amantes, y al no encontrarlos dirá: “Prefiero volver con mi primer esposo, porque antes me iba mejor que ahora”. 8Ella no ha querido reconocer que soy yo quien le da el grano, el vino nuevo y el aceite. Yo le he multiplicado la plata y el oro, ¿y que hizo con ellos? ¡Falsos dioses!
9»Por eso, llegado el momento le quitaré mi trigo y mi vino nuevo. La dejaré sin la lana y el lino que le di para cubrir su desnudez. 10Voy a exhibir su desvergüenza a la vista de sus amantes, y nadie la librará de mi mano. 11Pondré fin a todo su jolgorio: sus peregrinaciones, sus lunas nuevas, sus días de reposo, y sus fiestas solemnes. 12Devastaré sus vides y sus higueras, que consideraba la paga de sus amantes. Las convertiré en maleza, y los animales del campo acabarán con ellas. 13La llamaré a cuentas por los días en que quemaba ofrendas a sus falsos dioses, cuando se adornaba con zarcillos y joyas, y, olvidándose de mí, se iba tras sus amantes —afirma el SEÑOR—.
14»Por eso, ahora voy a seducirla: me la llevaré al desierto y le hablaré con ternura. 15Allí le devolveré sus viñedos, y convertiré el valle de la Desgracia en el paso de la Esperanza. Allí me corresponderá, como en los días de su juventud, como en el día en que salió de Egipto.
16»En aquel día —afirma el SEÑOR—, ya no me llamarás: “mi señor”, sino que me dirás: “esposo mío”. 17Te quitaré de los labios el nombre de tus falsos dioses, y nunca más volverás a invocarlos. 18Aquel día haré en tu favor un pacto con los animales del campo, con las aves de los cielos y con los reptiles de la tierra. Eliminaré del país arcos, espadas y guerra, para que todos duerman seguros. 19Yo te haré mi esposa para siempre, y te daré como dote el derecho y la justicia, el amor y la compasión. 20Te daré como dote mi fidelidad, y entonces conocerás al SEÑOR.
21»En aquel día yo responderé —afirma el SEÑOR—; yo le responderé al cielo, y el cielo le responderá a la tierra; 22la tierra les responderá al cereal, al vino nuevo y al aceite, y estos le responderán a Jezrel. 23Yo la sembraré para mí en la tierra; me compadeceré de la “Indigna de compasión”, a “Pueblo ajeno” lo llamaré: “Pueblo mío”; y él me dirá: “Mi Dios”».
Reina-Valera 1960
1Decid a vuestros hermanos: Ammi; y a vuestras hermanas: Ruhama. 2Contended con vuestra madre, contended; porque ella no es mi mujer, ni yo su marido; aparte, pues, sus fornicaciones de su rostro, y sus adulterios de entre sus pechos; 3no sea que yo la despoje y desnude, la ponga como el día en que nació, la haga como un desierto, la deje como tierra seca, y la mate de sed. 4Ni tendré misericordia de sus hijos, porque son hijos de prostitución. 5Porque su madre se prostituyó; la que los dio a luz se deshonró, porque dijo: Iré tras mis amantes, que me dan mi pan y mi agua, mi lana y mi lino, mi aceite y mi bebida. 6Por tanto, he aquí yo rodearé de espinos su camino, y la cercaré con seto, y no hallará sus caminos. 7Seguirá a sus amantes, y no los alcanzará; los buscará, y no los hallará. Entonces dirá: Iré y me volveré a mi primer marido; porque mejor me iba entonces que ahora.
8Y ella no reconoció que yo le daba el trigo, el vino y el aceite, y que le multipliqué la plata y el oro que ofrecían a Baal. 9Por tanto, yo volveré y tomaré mi trigo a su tiempo, y mi vino a su sazón, y quitaré mi lana y mi lino que había dado para cubrir su desnudez. 10Y ahora descubriré yo su locura delante de los ojos de sus amantes, y nadie la librará de mi mano. 11Haré cesar todo su gozo, sus fiestas, sus nuevas lunas y sus días de reposo, y todas sus festividades. 12Y haré talar sus vides y sus higueras, de las cuales dijo: Mi salario son, salario que me han dado mis amantes. Y las reduciré a un matorral, y las comerán las bestias del campo. 13Y la castigaré por los días en que incensaba a los baales, y se adornaba de sus zarcillos y de sus joyeles, y se iba tras sus amantes y se olvidaba de mí, dice Jehová.
14Pero he aquí que yo la atraeré y la llevaré al desierto, y hablaré a su corazón. 15Y le daré sus viñas desde allí, y el valle de Acor por puerta de esperanza; y allí cantará como en los tiempos de su juventud, y como en el día de su subida de la tierra de Egipto. 16En aquel tiempo, dice Jehová, me llamarás Ishi, y nunca más me llamarás Baali. 17Porque quitaré de su boca los nombres de los baales, y nunca más se mencionarán sus nombres. 18En aquel tiempo haré para ti pacto con las bestias del campo, con las aves del cielo y con las serpientes de la tierra; y quitaré de la tierra arco y espada y guerra, y te haré dormir segura. 19Y te desposaré conmigo para siempre; te desposaré conmigo en justicia, juicio, benignidad y misericordia. 20Y te desposaré conmigo en fidelidad, y conocerás a Jehová.
21En aquel tiempo responderé, dice Jehová, yo responderé a los cielos, y ellos responderán a la tierra. 22Y la tierra responderá al trigo, al vino y al aceite, y ellos responderán a Jezreel. 23Y la sembraré para mí en la tierra, y tendré misericordia de Lo-ruhama; y diré a Lo-ammi: Tú eres pueblo mío, y él dirá: Dios mío.
Biblia del Jubileo
1Decid a vuestros hermanos, Ammi, y vuestras hermanas, Ruhama: 2Pleitead con vuestra madre, pleitead; porque ella no es mi mujer, ni yo su marido; quite, pues, sus fornicaciones de su rostro, y sus adulterios de entre sus pechos; 3para que yo no la despoje desnuda, y la haga tornar como el día en que nació, y la ponga como un desierto, y la deje como tierra seca, y la mate de sed. 4Ni tendré misericordia de sus hijos, porque son hijos de fornicaciones. 5Porque su madre fornicó; la que los engendró fue avergonzada; porque dijo: Iré tras mis amantes, que me dan mi pan y mi agua, mi lana y mi lino, mi aceite y mi bebida. 6Por tanto, he aquí yo cerco tu camino con espinas, y la cercaré con seto, y no hallará sus caminos. 7Y seguirá a sus amantes, y no los alcanzará; los buscará, y no los hallará. Entonces dirá: Iré, y me volveré a mi primer marido; porque mejor me iba entonces que ahora. 8Y ella no reconoció que yo le daba el trigo, y el vino, y el aceite, y que les multipliqué la plata y el oro con que hicieron a Baal. 9Por tanto yo tornaré, y tomaré mi trigo a su tiempo, y mi vino a su sazón, y quitaré mi lana y mi lino que había dado para cubrir su desnudez. 10Y ahora descubriré yo su locura delante de los ojos de sus amantes, y nadie la librará de mi mano. 11Y haré cesar todo su gozo, su fiesta, su nueva luna y su sábado, y todas sus festividades. 12Y haré talar su vid y su higuera, de la que ha dicho: Mi salario me son, que me han dado mis amantes. Y las reduciré a un matorral, y las comerán las bestias del campo. 13Y visitaré sobre ella los tiempos de los baales, a los cuales incensaba, y se adornaba de sus zarcillos y de sus joyeles, y se iba tras sus amantes olvidada de mí, dice el SEÑOR. 14Por tanto he aquí, yo la induciré, y la llevaré al desierto, y hablaré a su corazón. 15Y le daré sus viñas desde allí, y el valle de Acor por puerta de esperanza; y allí cantará como en los tiempos de su juventud, y como en el día de su subida de la tierra de Egipto. 16Y será que en aquel tiempo, dice el SEÑOR, me llamarás marido mío, y nunca más me llamarás Baali. 17Porque quitaré de su boca los nombres de los baales, y nunca más serán mentados por su nombre. 18Y haré por ellos concierto en aquel tiempo con las bestias del campo, y con las aves del cielo, y con las serpientes de la tierra; y quebraré arco, y espada, y batalla de la tierra, y los haré dormir seguros. 19Y te desposaré conmigo para siempre; te desposaré conmigo en justicia, juicio, misericordia, y miseraciones. 20Y te desposaré conmigo en fe, y conocerás al SEÑOR. 21Y será que en aquel tiempo responderé, dice el SEÑOR, yo responderé a los cielos, y ellos responderán a la tierra; 22y la tierra responderá al trigo, al vino, y al aceite, y ellos responderán a Jezreel. 23Y la sembraré para mí en la tierra, y tendré misericordia de Lo-ruhama; y diré a Lo-ammi: pueblo mío tú; y él dirá: Dios mío.