¿Qué significa Proverbios 1:3?

Este versículo nos ofrece cuatro términos que hacen que nuestro aprendizaje suba de nivel. En el versículo 2, Salomón nos pide que usemos el libro de Proverbios para discernir e identificar qué razones son prudentes o qué razones no lo son. La frase "prudentes consejos" viene del hebreo haskēl, que literalmente significa "prudencia", "instrucción" o "sabiduría". En el versículo tres, Salomón insta al lector a "recibir" este tipo de instrucción, y a que se comprometa a que esa información se acabe convirtiendo en conocimiento. La frase hebrea lā qahat mūsar literalmente significa "enseñar o causar inteligencia", algo así como "aprender a aprender". Esa transición ocurre a través de la instrucción que trata de hacer crecer cuatro rasgos diferentes de nuestro carácter: la prudencia, la justicia, el juicio y la equidad.

La justicia es también un término causativo y también podría referirse a la "moralidad". Recibir justicia es aprender a vivir una vida moral y ética basándonos en los principios del Señor. La palabra justicia significa "tener discreción" o "determinación"; es el término que se usa cuando se comunica un veredicto o una sentencia. El tercer rasgo de carácter que debemos recibir es el juicio, o la capacidad de juzgar la información que recibimos y las situaciones que experimentamos. Finalmente, la equidad se refiere a la "prosperidad y el acuerdo". Este rasgo de carácter tiene como objetivo tratar a los demás con equidad, pero eso no quiere decir que se refiere a la igualdad general. En cambio, debe entenderse dentro del contexto de la "justicia". Ser "justo" significa darle a cada persona lo que le corresponde. Juntos, estos cuatro rasgos describen el segundo propósito del libro de Proverbios. Debemos recibir la capacidad de: aprender, vivir vidas morales, discernir el curso de acción correcto y tratar a los demás tal y como se merecen que se les trate.